"Resulta que no puedes perder las 61 libras (27 kilos) que ganaste durante el embarazo simplemente desplazándote por Instagram y preguntándote por qué no te ves como las modelos de bikini".
Así parte la honesta declaración de Blake Lively (Gossip girl) sobre el estado de su cuerpo luego de tener a la segunda hija de su matrimonio con Ryan Reynols (Deadpool) durante el año 2016.
La actriz ocupó su cuenta de Instagram para mostrar su orgullo tras un largo proceso de recuperación del tono físico luego de dos embarazos y romper de paso las altas expectativas que se tienen sobre las famosas en este tipo de procesos.
"10 meses para ganar peso, 14 meses para perderlo", complementa.
Como era de esperar, el mensaje de aceptación de Lively fue celebrado por sus fans, que al momento de la publicación de esta nota ya le daban más de 2 millones de like.