Luego de que su hijo Gonzalo criticara su relación con Isabel Preysler, otro de los hijos de Mario Vargas Llosa, Álvaro, ha salido a defender a su padre en medio de su nuevo estado sentimental.
"Mis padres han sido siempre muy deferentes con las parejas de sus hijos, jamás han interferido o expresado objeción alguna en relación con ellas, fueran cuales fueran las circunstancias. Le debemos a mi padre ser igualmente respetuosos con sus afectos y sentimientos, un espacio en el que nadie tiene derecho a inmiscuirse", declara el hijo mayor del escritor por medio de una carta publicada en la cuenta de Twitter de su esposa, Susana Abad.
Este destaca que si bien sus padres celebraron sus 50 años de matrimonio en mayo pasado en Nueva York, ellos ya sabían que se separarían y que el evento no pudo ser suspendido porque estaba agendado desde hace un buen tiempo.
Hoy, Vargas Llosa hijo dice que "mi familia pasa, como tantas en el mundo, por un proceso difícil pero superable. Mi familia tiene el temple y el temperamento necesarios para afrontar esta situación con serenidad, ánimo y buen humor. Mi madre, una gran persona, está muy bien, con muchos planes, amigos y familia. Mi padre está muy bien también y trabajando mucho, ha terminado su novela Cinco esquinas, ha empezado otra, ha escrito un prólogo para la edición de su obra en la Pléiade y otros textos más, y tiene numerosos compromisos culturales, académicos y políticos en las semanas y meses que vienen, más de los que le gustaría".
Acerca del nuevo amor de su padre con Isabel Preysler, ex de Julio Iglesias, comenta que "mi padre habló conmigo, me lo explicó y le dije que respetaba mucho su decisión. El fue, como es siempre, muy honesto con nosotros".
Álvaro señala que "los hijos no eligen las parejas de sus padres, del mismo modo que los padres no eligen las parejas de sus hijos, lo que hacen es tener consideración por sus decisiones y desearles suerte. Eso es lo civilizado y lo justo".
En relación a la nueva pareja de su progenitor, declara que "Isabel Preysler me parece una persona interesante, una persona elegante, y evidentemente representa para mi padre algo importante. Nadie hace lo que ha hecho mi padre si no siente por otra persona afecto genuino. Yo respeto profundamente su decisión, exactamente igual que respetaría la decisión de mi madre si ella decidiera reahacer su vida con otra persona".
Álvaro Vargas Llosa destaca que "no me corresponde a mí ni a nadie más que a ellos decidir si quieren casarse, pero mostraría el mismo respeto que le he mostrado hasta ahora, y le desearía suerte, como lo haría si se tratara de mi madre. Es lo natural en hijos que tienen consideración por las decisiones de vida que toman sus padres".
