Puede ser uno de los descubrimiento más relevantes para comprender el desarrollo de la raza humana fuera de África y dio por una casualidad, cuando en 2017 un estudiante de doctorado encontró unas huellas cerca de lo que alguna vez fue un lago en Arabia Saudita. Ahora se sabe que se trata de uno de los rastros humanos más antiguos en la península arábiga.
En un estudio publicado en Science Advances, investigadores de los Institutos Max Planck de Ecología Química (MPI-CE) y la Ciencia de la Historia Humana (MPI-SHH) en Jena, Alemania y la Universidad Royal Holloway de Londres, Reino Unido, junto con un equipo de socios internacionales, describen una gran conjunto de huellas fosilizadas descubiertas en un antiguo depósito de lago en el desierto de Nefud en Arabia Saudita, que datan de hace 120 mil años.
Los investigadores identificaron con seguridad como homínidos siete de los cientos de huellas descubiertas. Esto incluyó a cuatro que, dada su orientación, distancias entre sí y diferencias de tamaño, se interpretaron como dos o tres individuos que viajaban juntos.
“Las huellas son una forma única de evidencia fósil ya que proporcionan instantáneas que típicamente representan unas pocas horas o días”, dijo el investigador Matthew Stewart, del Instituto Max Planck de Ecología Química.
Las impresiones fueron fechadas utilizando luminiscencia estimulada ópticamente, una técnica que dispara luz a los granos de cuarzo y mide la cantidad de energía emitida por ellos.
La edad de las huellas es de especial interés. Datan de un período conocido como el último interglacial, una época de condiciones relativamente húmedas en toda la región y un momento importante en la prehistoria humana.
Estos hallazgos sugieren que los movimientos humanos más allá de África durante el último interglacial se extendieron al norte de Arabia, lo que destaca la importancia de Arabia para el estudio de la prehistoria humana.