Hasta el 95 % de la superficie de los océanos de la Tierra habrá cambiado a finales de siglo si la humanidad no frena sus emisiones de carbono, según una investigación publicada este jueves (27.08.2021).
El clima de la superficie de los océanos, o condiciones definidas por la temperatura de las aguas superficiales, la acidez y la concentración del mineral aragonito –que muchos animales marinos utilizan para formar huesos y caparazón–, sustenta la gran mayoría de la vida marina.
Los mares del mundo han absorbido alrededor de un tercio de toda la contaminación por carbono producida desde la Revolución Industrial.
Un clima menos hospitalario
Pero con el aumento de los niveles de CO2 en la atmósfera a un ritmo sin precedentes en al menos tres millones de años, se teme que el clima de la superficie de los océanos se vuelva menos hospitalario para las especies que alberga.
Los investigadores estadounidenses querían ver qué efecto ha tenido ya la contaminación por carbono en la superficie del océano desde mediados del siglo XVIII. También proyectaron el impacto de las emisiones hasta el año 2100.
Para ello, modelizaron los climas oceánicos mundiales en tres periodos de tiempo: principios del siglo XIX (1795-1834), finales del siglo XX (1965-2004) y finales del siglo XXI (2065-2014).
Modelos con escenarios de emisiones
A continuación, los investigadores han analizado los modelos con dos escenarios de emisiones. El primero, conocido como RCP4.5, prevé un pico de emisiones de gases de efecto invernadero para 2050, seguido de un lento descenso durante el resto del siglo.
El segundo escenario, el RCP8.5, es un enfoque de "seguir como hasta ahora", en el que las emisiones siguen aumentando durante los próximos 80 años.
En la revista Nature Scientific Reports, los investigadores descubrieron que, en el escenario RCP4.5, es probable que el 36 % de las condiciones de la superficie del océano presentes durante el siglo XX desaparezcan en 2100. En el escenario de altas emisiones, esa cifra aumenta hasta el 95 %.
El equipo también descubrió que, si bien los climas de la superficie oceánica mostraron pocos signos de cambio durante el siglo XX, en 2100, hasta el 82 % de la superficie oceánica podría experimentar climas no vistos en la historia reciente.
Estos incluyen mares más calientes, más ácidos y que contienen menos minerales vitales para el crecimiento de la vida marina.
"Adaptadas a un clima que está desapareciendo"
La autora principal del estudio, Katie Lotterhos, del Centro de Ciencias Marinas de la Universidad Northeastern, dijo que la composición cambiante del océano debido a la contaminación por carbono probablemente afectaría a todas las especies de la superficie.
"Las especies que están estrechamente adaptadas a un clima que está desapareciendo tendrán que adaptarse a condiciones diferentes", dijo a la AFP.
"Un clima en el que la temperatura y la química del agua son comunes hoy en día será raro o ausente en el futuro".
Aunque hasta ahora las especies de la superficie han podido desplazarse para evitar las zonas anómalas de calor o acidez del océano, el estudio del jueves sugiere que en el futuro sus opciones pueden verse limitadas debido al calentamiento y la acidificación casi uniformes.
"Muchas especies marinas ya han desplazado sus áreas de distribución en respuesta a las aguas más cálidas", dijo Lotterhos.
"Las comunidades de especies que se encuentran en una zona seguirán desplazándose y cambiando rápidamente en las próximas décadas".
Dijo que los Gobiernos debían vigilar los futuros cambios de hábitos de las especies de la superficie marina.
Pero, en última instancia, los océanos del mundo necesitan que cesen las emisiones que impulsan su calentamiento y acidificación.
"Sin la mitigación (de las emisiones), los climas novedosos y la desaparición de la superficie del mar serán generalizados en todo el planeta para el año 2100", dijo Lotterhos.