Esta semana, el reconocido actor internacional, James Franco, reconoció tener una adicción al sexo, tras ser denunciado por dos mujeres de abuso sexual.
Se trata de dos personas que eran parte de una escuela de actuación, donde Franco cometió abuso de su poder.
En este contexto, los representantes de las afectadas emitieron un comunicado, donde manifiestan su molestia tras los dichos del actor.
“Además de estar ciego sobre las dinámicas de poder, Franco es completamente insensible y aparentemente todavía no le importa el inmenso dolor y sufrimiento que hizo pasar a sus víctimas con esta farsa de su escuela de actuación”, aseguraron en un comunicado, los representantes de las actrices Sarah Tither-Kaplan y Toni Gaal.
“Hacer de plataforma de abusadores mientras se excluye a las sobrevivientes, causa aún más daño. La inclusión de sobrevivientes en listas negras sigue siendo un problema muy real”, agregaron en sus redes sociales.