AFP
El cómic brasileño vive actualmente su edad de oro, tras años de incertidumbre, con la eclosión de nuevos talentos que empiezan a darse a conocer en el extranjero.
Autores como Fábio Moon, Daniel Galera, Marcelo Quintanilha y S. Lobo, que dieron este domingo una charla en el Salón del Libro de París, son los máximos exponentes de un cómic más experimental y maduro.
"En Brasil vivimos un buen momento para el cómic. Internet y la multiplicación de festivales han creado un clima más favorable para la creación", explica Moon, ganador del premio Eisner, el galardón estadounidense de referencia en el ámbito del cómic.
Tras sufrir un parón en los años 90, en gran parte por la crisis económica, el cómic brasileño cobra ahora una segunda vida con obras como "Daytripper" de Moon y su hermano gemelo Gabriel Bá o "Cachalote" de Galera y Rafael Coutinho.
Los cómics para niños siguen siendo los más populares en Brasil, pero algunos autores se han interesado por historias más adultas, herederas de los años 80.
"En aquella época hubo un boom de los cómics alternativos en nuestro país con historias irónicas, cómicas y de gran calidad", asegura Moon. "Fue el resultado de una apertura de la expresión tras la dictadura (1964-1985). Era una necesidad del pueblo".