A muchos les puede parecer una quimera luchar contra el estrés y la ansiedad.

Sin embargo, para los hablantes de neerlandés, el idioma oficial de Países Bajos y de algunas regiones de Bélgica, la clave puede ser tan simple como aplicar una palabra: uitwaaien.

Su pronunciación puede parecer enrevesada (para un hispanohablante ya te aviso que lo es), pero su significado es bastante sencillo.

Uitwaaien es de esas palabras que no tienen una traducción literal en nuestro idioma. Equivaldría a "tomar una bocanada de aire fresco".

Los neerlandeses parecen tenerlo claro. Ante la preocupación y el estrés, lo mejor es salir fuera, caminar, hacer ejercicio y disfrutar del aire libre.

"Lo primero que me viene a la mente cuando pienso en uitwaaien es una playa con viento. Significa irse de paseo a un sitio donde te pegue la brisa", describe a BBC Mundo Jasper van Emmerick, periodista neerlandés residente en Utrecht, Países Bajos.

Agradable, fácil y relajante experiencia

"Uitwaaien es básicamente la actividad de pasar tiempo en exteriores mientras te golpea el viento, ya sea caminando o montando bicicleta", reafirma a BBC Mundo Caitlin Meyer, profesora del departamento de lingüística neerlandesa en la Universidad de Ámsterdam, Países Bajos.

Meyer coincide con Van Emmerick y afirma que, donde ella vive, uitwaaien le recuerda a la playa, pero que puede practicarse en cualquier espacio abierto, como un bosque.

"Es algo que haces para limpiar tu mente y refrescarte. Expirar malos aires y respirar buenos. De hecho, para mi novio también puede significar ir con un coche sin capota por la carretera. En general se trata de una experiencia agradable, fácil y relajante", amplía Meyer.

La académica aclara que tampoco tiene una connotación espiritual ni mucho menos. De hecho, para los neerlandeses es una actividad muy normal y ni siquiera consideran uitwaaien como algo "exclusivamente neerlandés".

Origen

Puede que te estés preguntando por qué el neerlandés tiene una palabra específica para esta actividad y otros idiomas no.

Si bien no están claras las razones históricas o sociales, "lingüísticamente formar verbos en neerlandés con una preposición -en este caso uit- es bastante sencillo y eso pudo haber ayudado al origen de dicha palabra", explica Meyer.

A fines del siglo XVI, significaba ondear o agitar algo al viento, como una bandera o vela desde un barco. Dicha connotación sigue usándose, pero para fines del siglo XIX uitwaaien también describía lavar, secar y refrescar cosas al viento, como la ropa.

"Luego, este significado se extendió para incluir también a las personas, sobre todo aquellos enojados que necesitaban relajarse en el viento o gente incansable que quería gastar energías", dice la especialista.

"Antes se usaba como un pronombre reflexivo, por lo que el significado verbal de ahora es una innovación moderna. El lenguaje siempre fluye", afirma Meyer.

Los beneficios de pasar tiempo al aire libre para combatir el estrés

El estrés puede afectarnos a todos de forma distinta, pero si se vuelve crónico puede tener repercusiones negativas en nuestra vida diaria.

De acuerdo al servicio nacional de salud británico (NHS por sus siglas en inglés), el exceso de estrés puede afectar nuestro humor, cuerpo y relaciones, "sobre todo cuando se siente fuera de control".

También nos hace sentir ansiosos, irritables y afecta nuestra autoestima. Puede, incluso, generar agotamiento físico, mental y emocional que puede desembocar en otros síntomas psicosomáticos.

En 2016, un estudio de la Universidad de Exeter analizó los beneficios de ejercitarse al aire libre y pasar tiempo cerca de la naturaleza con frecuencia, al menos media hora en cinco días de la semana.

Los conductores del estudio no solo resaltaron el impacto positivo del "ejercicio verde" para el estrés y la salud mental, sino también para combatir otros problemas sanitarios como la obesidad.

Calcularon, incluso, que ejercitarse y pasar tiempo al aire libre, ya sea corriendo, caminando o montando bicicleta, ahorra millonarias sumas de dinero al sistema público sanitario.

Así que aunque cueste escribirlo, traducirlo y pronunciarlo, parece que los neerlandeses saben bien de lo que hablan cada vez que salen fuera a vivir el uitwaaien.

Publicidad