Discurras ti rumantsch? ¿Hablas romanche?

El romanche es una de las cuatro lenguas nacionales de Suiza, pero menos del 0.5% de suizos podría decir que sí a esta pregunta.

El romanche es una lengua romance originaria del cantón más grande de Suiza, los Grisones, ubicado en el extremo sureste del país.

En el último siglo, el número de personas que habla romanche ha disminuido en un 50%. Hoy en día tan solo unas 60.000 personas hablan este idioma.

Los viajeros que visitan el Cantón de los Grisones todavía pueden ver el romanche en las señales de la calle, o escucharlo en los restaurantes cuando son recibidos con un 'allegra' (bienvenido).

Pero casi el 40% de las personas que hablan romanche han abandonado este lugar en búsqueda de mejores oportunidades laborales, y es raro escuchar el romanche fuera del cantón.

En un país tan pequeño, ¿puede sobrevivir un idioma hablado por tan poca parte de la población? ¿O está condenado a desaparecer como hicieron los dinosaurios?

Origen romano

Se cree que el romanche se originó alrededor del año 15 antes de Cristo cuando los romanos conquistaron Rhaetia, lo que ahora es el Cantón de los Grisones.

El romanche es el resultado de la combinación del latín vulgar, que hablaban los soldados y colonos romanos, y el rético, el idioma de los nativos.

Este nuevo lenguaje híbrido fue el idioma principal de la zona hasta el siglo XV, cuando el cantón se unió a una confederación conocida como el Estado Libre de las Tres Ligas.

El idioma principal de las Tres Ligas era el alemán. Las aldeas locales se encontraban aisladas las unas de las otras debido al terreno montañoso, por lo que el romanche se fragmentó en cinco dialectos diferentes, cada uno con su propio lenguaje escrito.

Esta falta de uniformidad dificultó la expansión del romanche, mientras que el francés y el alemán siguieron creciendo.

Más y más alemanes llegaron a la zona y en el siglo XIX los residentes romanches comenzaron a aprender alemán. Hoy en día el alemán es el idioma principal en el cantón de los Grisones.

Pero este no fue el fin del romanche.

Lengua oficial

Los suizos están orgullosos de su cultura y en 1938 más del 90% del país votó a favor de hacer del romanche una de las lenguas oficiales.

El gobierno suizo invierte unos 7.6 millones de francos suizos anuales en promover y preservar el romanche.

Pero tener un idioma oficial con cinco dialectos distintos puede resultar engorroso.

En 1982 Heinrich Schmid, un lingüista de la universidad de Zürich, creó una versión unificada.

Esta versión se utiliza desde 1996 como idioma administrativo, pero los habitantes del cantón se han resistido a abandonar sus propios dialectos a favor de la versión común.

"Muchos ven esta unificación como una amenaza a su propio dialecto", explica Daniel Telli, director de Lia Rumantscha (la institución suiza que junta a todas las organizaciones de la lengua romanche).

El lenguaje existe para transmitir la cultura de un pueblo a la próxima generación, por lo que es de esperar que cada zona proteja su propio dialecto. Cuando el mundo pierde un idioma perdemos el conocimiento de las generaciones pasadas.

Sin el romanche, ciertas costumbres -como por ejemplo el Chalandamarz, un antiguo festival que se celebra cada 1 de marzo en el Valle de Engadina para celebrar el fin del invierno y la llegada de la primavera- podrían perderse para siempre.

"El romanche contribuye a crear una Suiza multilingüe", dice Daniel Telli. "La muerte de este idioma implicaría la pérdida de una forma única de ver y describir el mundo".

Resurgimiento del romanche

Pero cada vez menos personas hablan romanche, ya que los habitantes del cantón prefieren aprender idiomas más comunes.

En muchas escuelas del cantón el alemán es el principal idioma de instrucción. Solo un puñado de aldeas pequeñas continúa enseñando en una combinación de su dialecto específico y el romanche unificado.

La mayoría de escuelas ofrece clases de romanche, pero no es un curso obligatorio.

Marja Gartmann, por ejemplo, trabaja en relaciones públicas. Escogió aprender francés, italiano e inglés; idiomas más útiles en una economía global.

Sin embargo todavía hay esperanza para el romanche: en los últimos años el interés por esta lengua ha comenzado a crecer.

Irónicamente, parece ser debido a la globalización.

"Hace años nadie tenía interés en las cosas tradicionales suizas, pero ahora se considera atractivo y moderno volver a tus raíces", dice Marja.

"La gente se enorgullece de hablar romanche porque es raro y distinto, y todo lo que es diferente ahora se considera interesante".

Hoy en día hay una estación de televisión y radio y un periódico en romanche. Todos usan una combinación del lenguaje unificado y los diferentes dialectos. También hay librerías con libros sólo en romanche y hasta un grupo de hip hop que rapea en romanche.

"Todos crecimos en el cantón y nuestra lengua es el romanche", dice Johannes Just, uno de los miembros del grupo. "En el rap el lenguaje es una manera de expresarte, y si no te expresas en tu lengua materna es más difícil dar pie al flujo de ideas".

"Nuestra idea no era promover este idioma con nuestra música, pero si lo hacemos pues mejor todavía".

La tecnología también está ayudando a resucitar idiomas como el romanche.

Gracias a websites, blogs, y redes sociales las personas que hablan romanche pueden conectar entre ellas.

El gigante tecnológico Google también ha lanzado el proyecto Idiomas en Peligro de Extinción para preservar las lenguas más vulnerables del mundo, incluyendo el romanche.

El poema del siglo XIX "Al pievel romontsch" (Para el pueblo romanche) anima a los habitantes del cantón a "levantarse y defender la antigua lengua del romanche". Queda por ver si suficientes residentes del cantón piensan que vale la pena preservar este histórico idioma.

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