Son malos tiempos para Snapchat.
Snap, la empresa matriz de la aplicación de mensajería que se hizo famosa por causar furor entre jóvenes millenials de todo el mundo por sus mensajes que se borraban de forma automática y sus peculiares "historias" vive una de las peores crisis de su corta historia.
Solo este miércoles, sus acciones cayeron más de un 14% en la bolsa, tras otra caída de 16% del día anterior.
La causa, según los analistas de Bloomberg, fue un reporte económico de la propia compañía publicado el martes, que confirmaba una noticia recurrente en los últimos meses: el declive de la aplicación que, al menos por un tiempo, amenazó a las redes sociales más populares.
De acuerdo con el reporte, los ingresos del tercer trimestre de la aplicación creada por Evan Spiegel fueron de US$207,9 millones, 27,9 millones menos de lo pronosticado; registró, además, una bajada de hasta 60% en los precios de la publicidad y pérdidas por US$443 millones.
Detrás de todo, un bajo crecimiento del número de nuevos usuarios que, de julio a septiembre, solo sumaron 4,5 millones, una cifra menor a lo calculado para este periodo, mientras en regiones, como Europa, su crecimiento se haya prácticamente estancado.
Y si la aplicación ya cuenta con 178 millones de usuarios mensuales a nivel mundial, la cifra alcanza su significado cuando se compara con el de otras aplicaciones, como Instagram, una de sus principales competidoras, que la utilizan unos 300 millones de personas por día.
Pero ¿a qué obedece esta crisis de unas de las aplicaciones más populares entre los jóvenes hasta hace poco tiempo?
Los expertos señalan cuatro elementos fundamentales:
- Snapchat es demasiado difícil de usar, ya que está diseñada para un público con ciertas habilidades en el mundo de las aplicaciones para celulares.
- No ha logrado atraer usuarios de Android, el sistema operativo para móviles dominante en muchos mercados internacionales.
- Problemas con su transición a un sistema de publicidad automatizada que ha constituido una barrera para las ventas.
- La competencia de otras grandes empresas, que le han dado una dura guerra en el mercado e incluso, han copiado algunas de sus herramientas.
Y es que Snapchat enfrenta una batalla muy difícil.
Los recursos extraordinarios con los que cuenta Facebook ya le permitieron adquirir Instagram y WhatsApp, ofrecerse a comprar la compañía de Spiegel y, ante la negativa de este, copiar alguna de sus herramientas más exitosas.
Fue el caso, por ejemplo, de las Instagram Stories, un formato de videos similar a una de las mayores atracciones de Snapchat con el que Instagram terminó, finalmente, por ganar la partida.
Y por si fuera poco, las apuestas de la compañía también han terminado en el fracaso, como sus prometedoras gafas Spectacles, un concepto que apostaba, como el propio estilo de la aplicación, por lo fresco y lo juvenil, pero que se malogró por su alto precio y su escasa utilidad y que le dejaron, al final, US$40 millones en pérdidas.
Los cambios
Ante este panorama a Snapchat no le quedaban muchas alternativas: anunciar una renovación o dejar a la aplicación morir, como antes sucedió con Bebo, MySpace o Friends Reunited.
Una de las escasas buenas noticias fue la compra de cerca del 12% de la compañía por parte el gigante asiático Tencent, que controla las populares aplicaciones chinas WeChat y QQ, aunque la participación y el interés de la empresa todavía constituyen un misterio.
En una conferencia ante los inversores, Spiegel admitió que las dificultades para entender la aplicación habían sido uno de sus lastres desde su surgimiento y que trabajaría para modificarla.
"Una cosa que hemos escuchado a lo largo de los años es que Snapchat es difícil de entender o difícil de usar y nuestro equipo ha estado trabajando para responder a estos comentarios. Como resultado, actualmente estamos rediseñando nuestra aplicación para que sea más fácil de usar", dijo.
Pero no lo dejó ahí.
El empresario, de 27 años anunció que la aplicación será sometida a cambios "drásticos" que podrían, incluso, "espantar" a los viejos usuarios, pero atraer nuevos interesados.
Según trascendió de la conferencia, la aplicación rediseñada tendría como objetivo facilitar el descubrimiento de contenido en la plataforma y ofrecer a los usuarios una experiencia más personalizada.
Los usuarios, de acuerdo con Spiegel, tendrán eventualmente su propia experiencia en Stories, que utilizaría un mecanismo automático de aprendizaje de las tendencias de los usuarios.
Y mientras, todavía quedan en la interrogante dos cuestiones básicas: cuándo lanzará Snap la nueva versión de la aplicación y si esta, finalmente, la ayudará a salir de la crisis que atraviesa.
"No sabemos cómo va a funcionar", aseguró Spiegel.
"Con el tiempo hemos aprendido a no tener miedo de hacer grandes cambios de productos que creemos que son lo mejor para nuestra comunidad".