Quizás nunca te has fijado, pero ese aparato que probablemente lleve tu auto instalado debajo del asiento del conductor es una "caja negra" que, como las de los aviones, registra todos los datos significativos que pueden ser utilizados en caso de accidente.
Cerca del 99,5% de los vehículos nuevos en Estados Unidos ya circulan con una de estas cajas, oficialmente denominada "registrador de datos de incidencias".
La Unión Europea los ha hecho obligatorios a partir de este mes de julio para todos los autos nuevos.
El registrador o "caja negra" recoge ciertos datos durante los segundos previos a un accidente, así como en los instantes después de producirse.
Factores como la velocidad, si el conductor accionó el freno, si hubo un fallo técnico o el funcionamiento de los sistemas de seguridad como los cinturones o los airbags quedan grabados en el dispositivo.
También puede registrar las condiciones meteorológicas en el momento del impacto, o la fuerza del mismo.
La "caja negra" va atornillada al chasis debajo del asiento del conductor y está conectada a la centralita del auto.
Sus datos se pueden obtener as través del puerto OBD (siglas en inglés para On Board Diagnostics), el sistema de diagnóstico que llevan instalado la mayoría de los vehículos, o a través de un puerto del propio dispositivo.
En caso de accidente, estos datos pueden ser interpretados para intentar averiguar las causas de un siniestro. En la Unión Europea, los datos no serán accesibles a cualquiera, tan solo a las autoridades competentes.
Estándar
En Estados Unidos, excepto aquellos vehículos muy antiguos, la práctica totalidad de los autos lo llevan. En realidad no existe una ley federal que lo exija -como sí ha hecho ahora Bruselas para los autos nuevos en Europa-, pero se trata de una prestación estándar en la mayor parte de los modelos de fabricantes como Ford, Toyota, Honda, Chrysler, Honda o GM.
La información que puede obtenerse de estas "cajas negras" resulta muy valiosa en caso de accidente, y ya se utiliza frecuentemente en demandas por accidentes automovilísticos en Estados Unidos para determinar la responsabilidad del siniestro. El dispositivo puede determinar si el conductor manejaba en el momento del accidente de forma imprudente o si, por el contrario, el vehículo registró un fallo técnico.
En la Unión Europea, donde la medida ha tardado más en adaptarse por las dudas que generaba en cuanto a la protección de datos, la regulación obliga a que la información de estas "cajas negras" sea anónima y que solo sea utilizada por los Estados miembros para realizar análisis de seguridad vial y evaluar la eficacia de medidas concretas que se hayan adoptado, sin la posibilidad de identificar al conductor.
Bruselas quiere reducir en 25.000 el número de muertos en carretera y en 140.000 el de heridos graves para 2038.
Además de las "cajas negras", los nuevos vehículos también deben incorporar un "limitador de velocidad", que avisará al conductor cuando sobrepase el límite permitido y haciendo más difícil apretar el acelerador, aunque no lo bloqueará.
¿Qué intervalo de tiempo queda registrado en la "caja negra"?
El dispositivo va registrando y borrando información constantemente, aunque no graba video ni, a diferencia de los aviones, tampoco el audio.
En caso de accidente, el tiempo que queda registrado antes y después del siniestro dependen de la legislación de cada país.
En Estados Unidos, por ejemplo, la National Highway Traffic Safety Administration (Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras) exige 5 segundos de información antes del accidente, aunque quiere ampliarlo a 20 segundos.
La Unión Europea exige los 30 segundos anteriores al siniestro y los 5 posteriores.