Más de tres décadas después del desastre de Chernobyl (Chernóbil) surgió una nueva polémica en torno el peor accidente nuclear de la historia.

Tras el éxito de la miniserie producida por los canales HBO y Sky, la televisión estatal rusa anunció que está trabajando en su propia serie sobre lo sucedido.

Aseguró que esta se basará en los hechos históricos y mostrará cómo la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos (CIA) estuvo involucrada en el desastre.

El director de la serie, Aleksey Muradov, afirmó que mostrará "lo que realmente sucedió en ese entonces".

La miniserie de HBO, que terminó el lunes, recibió el puntaje más alto (9,7) para un programa de televisión en la historia en el sitio IMDB, la base de datos de películas y series, así como una calificación de 9,1 en su equivalente ruso Kinopoisk.

Pero en una entrevista con Komsomolskaya Pravda, el diario más leído de Rusia, Muradov dijo que su versión del programa "propone una visión alternativa sobre la tragedia de Prípiat".

"Hay una teoría de que los estadounidenses se infiltraron en la central nuclear de Chernóbil", dijo.

"Muchos historiadores no descartan la posibilidad de que el día de la explosión, un agente de los servicios de inteligencia del enemigo estuviera trabajando en la estación".

La revista estadounidense Hollywood Reporter informa que el Ministerio de Cultura ruso contribuyó con 30 millones de rublos (US$463.000) para la producción televisiva.

El reactor Nº 4 en la planta nuclear de Chernóbil explotó el 26 de abril de 1986 en la ciudad ucraniana de Prípiat.

Al menos 31 personas murieron inmediatamente después del accidente y los efectos se siguen sintiendo en la actualidad.

¿Qué opina Rusia de la serie Chernóbil de HBO?

Según Sarah Rainsford, corresponsal de la BBC en Moscú, hubo muchos elogios en Rusia por la autenticidad de Chernóbil.

El diario Izvestia la calificó como el retrato más "realista" de la época, comparado con la mayoría de las películas rusas. También se resaltó la manera en que la serie transmitió el heroísmo de la gente común.

Muchos han estado compartiendo sus propias historias de Chernóbil en las redes sociales y "los rusos más jóvenes las escuchan por primera vez", contó Rainsford.

Gracias por "devolvernos nuestra historia", escribió un usuario de Twitter.

Pero también hubo críticas.

"Un columnista afirmó que el programa era un complot para socavar la agencia atómica actual de Rusia. Otros lo llamaron 'propaganda' estadounidense encaminada a ensuciar la imagen de la URSS y exagerar la insensibilidad de la respuesta soviética", escribió Rainsford.

"Lo que nadie discute es que la gente está hablando de esto", agregó.

De hecho, el programa no logró la popularidad deseada en la televisión estatal rusa y los diarios sensacionalistas del país.

"Si los anglosajones filman algo sobre los rusos, definitivamente no corresponderá a la verdad", dijo el columnista Anatoly Wasserman, al hablar en el canal de televisión por internet Teleprogramma.

Esto es porque "no les gustamos" y "no nos pueden entender", añadió.

Komsomolskaya Pravda publicó varios artículos negativos sobre la miniserie, entre ellos uno sobre la teoría de la conspiración que afirma que fue producido por los competidores de Rosatom, la compañía nuclear estatal de Rusia, para arruinar la reputación del país como una potencia nuclear.

Pero los críticos en los medios de comunicación independientes elogiaron al guionista de la serie, Craig Mazin, por su minuciosa atención en los detalles.

"El respeto y la meticulosidad que los creadores del programa pusieron a su trabajo es impresionante", opinó en el sitio independiente de noticias ruso Meduza Slava Malamud, periodista estadounidense que creció durante la era soviética en lo que hoy es Moldavia.

"Una placa de un auto en una escena tiene los números reales de la región (de Kiev), ¿quién va a notar eso en Estados Unidos o Inglaterra?", dijo.

Al final, como concluye un analista, la razón principal de la reacción tras ver la serie es probablemente un sentimiento de vergüenza por ser Estados Unidos el que contó la historia de Chernóbil y no la propia Rusia.


Un desafío a las opiniones positivas sobre el pasado de Rusia

Análisis de Adam Robinson de BBC Monitoring

Para el Kremlin la historia es un tema altamente sensible.

Los medios oficiales tienden en la actualidad a mostrar una visión limpia e idealizada de la URSS y retratan a la Rusia de Putin como su heredera espiritual.

Esto hace que sea fácil ver cualquier crítica del pasado soviético como un ataque a la base de poder ideológico del Kremlin.

Es un movimiento que trata de controlar y proteger por completo las influencias externas, especialmente de un Occidente que considera hostil.

Algunos rusos sienten que la versión de la realidad ofrecida por los medios controlados por el Kremlin no es diferente a las mentiras del Estado soviético.

Como resultado, tal vez la idea más peligrosa es la pregunta clave que ronda el tema de Chernóbil: ¿cuál es el costo de las mentiras?

*Esta nota fue escrita en junio de 2019 y ha sido republicada luego que la serie de HBO "Chernobyl" ganara el premio Emmy 2019 como "Mejor miniserie".

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