AFP
Una adolescente estadounidense se convirtió en una sensación de las redes sociales tras contar la historia de cómo la serpiente que tiene como mascota terminó atascada en su oreja.
Ashley Glawe, de 17 años, fue al hospital con su mascota Bart, una pitón pequeña que se metió en el gran agujero que dejó un extensor -conocido también como "túnel"- en el lóbulo de su oreja cuando se tomaba selfies.
Las fotos se hicieron virales en las redes.
"Entré un poco en estado de shock", dijo a la prensa local al describir el incidente. "Comencé a temblar", añadió la joven de Oregon (oeste).
Glawe intentó que el animal saliera por su cuenta, pero al ver que no se movía llamó a los servicios de emergencia.
Los bomberos no lograron sacarla. Finalmente en el hospital le adormecieron la oreja y la lubricaron para extraer la serpiente, que resultó ilesa.