Adele contó cuáles eran sus planes para poner fin a su prohibición autoimpuesta de consumir alcohol, esto, mientras está en pleno proceso de descanso de su residencia en Las Vegas.
El mes pasado, la estrella reveló que había estado sobria durante más de tres meses pero que extrañaba tomar una copa. Hablándole al público que repletaba el Colosseum Caesar Palace en Las Vegas, explicó lo emocionada que estaba de volver a tomar una copa ahora que tiene algo de tiempo libre.
En este sentido, le dijo a su público que tiene pensado celebrar el final de la segunda etapa de sus espectáculos: "Me voy a relajar. También me molesta estar enferma porque este es un clima de vino tinto", dijo, según consignó Daily Mail.
Y añadió: "Dejé de beber, pero obviamente ahora estoy lista para empezar de nuevo porque es mi descanso".
La cantante señaló además que se vio obligada a eliminar su bebida alcohólica favorita (el vino tinto), porque causa estragos en su voz. "No puedo beber vino tinto nunca cuando canto porque no sé ustedes, pero el vino tinto me jode. No puedo soportarlo", explicó, añadiendo que su bebida preferida ahora es mitad agua con gas y mitad vino blanco con hielo.
"Una copa de vino tinto me pone al borde del abismo. Tengo la peor resaca, toda mi boca y mi lengua se ponen rojas. Parezco un desastre y eso simplemente me quita la voz", dijo.
Al revelar que ha estado luchando contra una enfermedad, Adele dijo que tenía guardada una costosa botella de vino Châteauneuf-du-Pape, pero que tendrá que esperar para "darse un gusto".
En octubre, Adele reveló que había dejado de beber durante tres meses y medio y afirmó que estaba "al borde del alcoholismo" cuando tenía 20 años.
La artista, de 35 años, le dijo a sus fans en uno de sus conciertos en Las Vegas: "Dejé de beber tal vez hace unos tres meses y medio. Es aburrido. Quiero decir, estuve literalmente al borde del alcoholismo durante gran parte de mis veintes, pero lo extraño mucho", concluyó.
