Esta noche, en un nuevo capítulo de “Juego textual”, Katty Kowaleczko, “Tita” Ureta, Begoña Basauri, María Jimena Pereyra, “Pepi” Velasco, “Chiqui” Aguayo, Rayén Araya y Yazmín Vásquez conversarán con el actor Álvaro Morales.
El integrante de producciones dramáticas tan recordadas como "Ámame", “Iorana”, “Romané” y “¿Dónde está Elisa?” revelará que actualmente se encuentra alejado de las telenovelas.
“Cumplí 50 años y pasaron algunas cosas en mi vida. Yo estuve varios años contratado, pero las teleseries empezaron a cambiar, y de hacer varias al año empezó a ser una que duraba más de un año, y tenías que estar esperando casi un año a que te contrataran de nuevo, llamarlos por teléfono, entonces dije ‘Ya está, mejor me dedico a otra cosa y voy a concretar un sueño que tenía guardado’”, sostendrá el actor, cuya última producción fue “Hasta encontrarte” (2022).
A eso se sumó que perdió a su mejor amigo, Alan Lethaby, dueño del restaurante “De cangrejo a conejo”, con quien tenía el proyecto de hacer algo juntos. “Ahí me di cuenta que de lo que más estamos hechos es de presente. Las cosas son aquí y ahora, o no son”, afirmará el actor, actualmente dedicado exclusivamente a la cocina.
En torno a su recordado personaje en “Iorana”, que le significó su primer personaje protagónico en telenovelas en 1998, el actor recordará que una vez fue brevemente secuestrado por nativos pascuenses mientras esperaba grabar una escena en exteriores. “Estoy esperando y de repente siento un relincho. Me doy vuelta y hay un caballo y un señor gigante con plumas, muy pectorálico, y me dice ‘¿Qué haces tú aquí?’”, recordará.
Finalmente se lo llevaron a caballo a dar un paseo y luego lo devolvieron al mismo lugar donde estaba, sin decirle ni una palabra. “No tenía miedo porque caché que ya había entrado en onda con ellos. En ningún caso fue amenazante ni nada”, indicará Álvaro.
Sobre su infancia, el ex villano de "Los Pincheira" revelará que se crió en un entorno muy católico, lo que marcó su vida. “Yo desperté muy tarde a la sexualidad, a los 22 años, que para mi época era estar súper atrás. Me pusieron al día, fue con una niña mayor. Yo estaba lleno de culpas y de trancas, tenía el pensamiento de que había que llegar virgen al matrimonio”, confesará.
A eso se sumó una temprana afición a las artes marciales orientales, a partir de su fanatismo por Bruce Lee, que lo llevó a dedicarse durante su juventud a disciplinas como el taekwondo y el kung fu, y posteriormente a estudiar medicina china. “No lo estudié para dedicarme a eso, sino porque era algo que me faltaba como conocimiento de lo oriental, que me fascinó desde chico”, contará. Finalmente, tuvo la oportunidad de viajar a China con un amigo, invitados por la embajada china, lo que cambió su vida para siempre.
“Llegué a Beijing y me quería quedar, sentí que todo tenía que ver conmigo, a pesar de que nada tenía que ver conmigo”, revelará el intérprete.
“Juego textual”, esta noche después del Campeonato Sub 20: Chile vs. Bolivia, por las pantallas de Canal 13.