Este viernes, se informó la muerte del destacado escritor nacional, diplomático y periodista, Jorge Edwards, a los 91 años.
La noticia fue confirmada por la Cancillería, que a través de un comunicado, manifestó su pesar por el fallecimiento de Edwards.
"El Ministerio de Relaciones Exteriores expresa su pesar por el fallecimiento del escritor, Premio Nacional de Literatura y diplomático chileno, Jorge Edwards, y hace extensivas sus condolencias a familiares y amigos", señalaron.
El ministro de las Culturas, Jaime de Aguirre, también lamentó el deceso del destacado escritor.
“Hoy se despide a un hombre fundamental de la literatura chilena e hispanoamericana, un intelectual que imprimió su fibra y pensamiento en el quehacer cultural contemporáneo. Jorge Edwards fue un creador que supo conjugar sensiblemente la literatura con la política y proyectó desde ahí su destacada carrera. Prueba contundente fue cuando se le reconoció con el Premio Cervantes y también con el Premio Nacional de Literatura, entre tantos otros. Enviamos un sentido homenaje y las condolencias a su familia y amigos", señaló.
Edwards fue miembro de la Academia Chilena de la Lengua, además de ser distinguido con numerosos premios, entre ellos, el premio Nacional de Literatura de 1994 y el Premio Cervantes de 1999.
Según recoge Memoria Chilena, Edwards nació el 29 de julio de 1931 en Santiago, y desde niño sintió gran inclinación por la lectura, sin embargo, nunca pensó que podría ser escritor profesional.
Estudió en el colegio San Ignacio de Loyola, donde tuvo por profesor al Padre Alberto Hurtado. Allí, su interés literario se vio acrecentado y escribió sus primeros ensayos, los que tenían como tema el mar.
Terminada la enseñanza escolar, estudió Derecho en la Universidad de Chile, pero no ejerció, pues optó por seguir su vocación literaria.
En 1952, publicó su primer volumen de cuentos titulado "El patio" y dos años más tarde, comenzó su carrera como diplomático.
En 1962, editó otro volumen de cuentos titulado "Gente de la ciudad", mientras que los años siguientes ejerció como secretario de la embajada de Chile en París. En forma paralela, escribió la novela "El peso de la noche", que publicó en 1965.
En 1970 fue enviado por el gobierno chileno a La Habana en misión especial para reinstaurar las suspendidas relaciones diplomáticas entre ambos países. Tres meses bastó para que fuera declarado por Fidel Castro como "persona non grata" por su apoyo a los intelectuales disidentes del régimen. De esta controvertida experiencia, surgió el libro "Persona non grata", el que publicado en 1971 causó gran polémica, pues en este, Edwards hizo una crítica directa a la política contingente.
Tras el golpe de Estado de 1973, decidió partir con destino a España. En este país, Edwards consiguió orientar su trabajo literario y desarrollar sus actividades como novelista.
Ya de regreso en Chile, en 1978, fue designado miembro de la Academia Chilena de la Lengua. En los años siguientes, Jorge Edwards publicó dos de sus libros más comentados: "El museo de cera" (1981) y, posteriormente, en 1987, "El anfitrión".
En 1990 ganó el Premio Comillas de la editorial Tusquets por su manuscrito sobre la vida de Pablo Neruda, titulado "Adiós, poeta".
En 1994, Jorge Edwards recibió el Premio Nacional de Literatura en reconocimiento a su larga trayectoria y su aporte a las letras chilenas, ese mismo año publicó "El whisky de los poetas".
En 1999, se le otorgó el Premio Cervantes y en el 2000, el Presidente Ricardo Lagos lo condecoró con la orden al mérito de Gabriela Mistral.