La boda real entre Meghan Markle y el príncipe Harry, celebrada en la capilla de San Jorge del Castillo de Windsor. fue sin lugar a dudas la ceremonia más popular del último tiempo.
A meses del matrimonio, la Duquesa de Sussex reveló un inédito detalle que poseía su vestido de novia con el cual dio el sí en el altar.
Markle lució un vestido de la diseñadora Clare Waight Keller, una creación de alta costura con escote alto y manga francesa junto a una tiara y un velo de cinco metros de longitud.
Aunque no se haya percibido a simple vista, Meghan cumplió con la tradición de vestir algo azul, aunque de manera oculta a los presentes.
"En algún lugar de aquí, hay una pieza… ¿la ves? ?¿La tela azul que está cosida dentro? Ese era mi 'algo azul'. Es tela del vestido que usé en nuestra primera cita", reveló la ex intérprete de Suits para el documental Queen of the world.
Además la mujer señaló que los 53 bordados de su velo representan a las 53 naciones de la Commonwealth.
Cabe recordar que Meghan y Harry se conocieron en una cita a ciegas hace dos años.
