Los habitantes del norte de Francia y parte del sur de Reino Unido, se sorprendieron la madrugada de este 13 de febrero al ver cómo un meteoro se desintegraba en el cielo al atravesar la atmósfera terrestre sobre el Canal de la Mancha. El hecho dejó una estela luminosa como si de una explosión se tratase.
El asteroide fue descubierto por Krisztián Sárneczky unas horas antes de que irrumpiera a la Tierra. Según la Agencia Espacial Europea (ESA, por sus siglas en inglés) no emitieron alertas porque no representaba un peligro para el planeta, debido a su pequeño tamaño: sólo medía un metro de ancho.
Fue bautizado como SAR2667 por su principal descubridor y corresponde a la séptima roca descubierta mientras viaja a la Tierra, las cuales no suponen un peligro para la humanidad ya que se desintegran al tener contacto con la atmósfera.
