Parte del atractivo que tiene el espectáculo que se ofrece en los circos es el riesgo que conlleva realizar cada una de las piruetas que se muestran.
Por supuesto, cuando todo sale bien, llueven los aplausos. Pero cuando se produce algún accidente, la preocupación y la angustia puede apoderarse del recinto.
Esto último fue lo que ocurrió recientemente en Rusia, cuando una gimnasta sufrió una aparatosa caída al no lograr agarrarse del trapecio, que si bien su altura no fue especificada, suele estar a unos siete metros del suelo.
De acuerdo con la información entregada por el medio ruso RT, la joven de tan solo 23 años cayó de espaldas, "perdió el conocimiento" y tuvo que ser trasladado hasta un hospital.
Con respecto a las consecuencias de esta situación, el portal citado explicó que "la acróbata sufrió una conmoción cerebral y una fractura en el brazo",