Varios son los astrónomos que han propuesto que en algún momento de esta década los extraterrestres se contactarán con la Tierra. Sin embargo, nunca antes habían dicho que podría ser dentro de los próximos diez años como sugiere un reciente estudio. 

Elaborado por Howard Isaacson y Reilly Derrick, ambos científicos de la Universidad de California, este informe asegura que, según sus análisis, el primer contacto de los humanos con la vida inteligente de otro planeta podría ocurrir, específicamente, el año 2029. 

Los expertos llegaron a esta conclusión por que los primeros mensajes de radio emitidos por las sondas espaciales Voyager 1 y Voyager 2, lanzadas al espacio exterior en el 1977 desde Cabo Cañaveral, en Florida, Estados Unidos, llegaron a dos estrellas cercanas en el 2007. Esto significa, entonces, que si esas señales fueron captadas por alguna vida inteligente que las haya enviado de vuelta a nuestro planeta, podría llegar a finales de la década. 

Según ComicBook, quien hace un resumen del estudio "estas naves espaciales se han comunicado con antenas de radio de la Red de Estaciones Profundas (DSN) para descargar datos científicos y datos de telemetría.Las transmisiones hacia el exterior desde la DSN viajan con la nave espacial y se encuentran más allá al espacio interestelar. Estas transmisiones han encontrado y encontrarán otras estrellas, arrojándonos la posibilidad de que la vida inteligente en otros sistemas solares se encuentre con nuestras transmisiones terrestres".

Analizaron las posibles zonas por las cuales han viajado y viajarán las sondas a través del sistema JPL Horizons, que proporciona información sobre la posición y movimiento de objetos en nuestro sistema solar, han encontrado sitios capaces de albergar algún tipo de civilización extraterrestre. 

"Calculamos las fechas de estos encuentros para determinar la hora y el lugar para albergar posible vida extraterrestre inteligente, así como su posibilidad para encontrar las transmisiones terrestres", indican los expertos.

Por otro lado, Jean-Luc Margot, radioastrónomo de la Universidad de California, refuta la hipótesis de este informe y explicó a Popular Sience que "nuestras transmisiones insignificantes e infrecuentes son poco propensas a ser detectadas por extraterrestres y revelar la existencia de la humanidad".

Además, añade que "la probabilidad de que exista otra civilización en esta pequeña burbuja es extraordinariamente baja, a menos que haya millones de civilizaciones en la Vía Láctea".

Publicidad