De seguro más de alguna vez te has preguntando qué harías si te ganas el premio máximo de la lotería. Viajes, lujos, una gran casa, son solo un poco de lo que podríamos tener si acertaramos a los números ganadores, que son elegidos al azar.

Sin embargo, hay una persona en todo el mundo, de origen rumano, que se ha ganado la lotería 14 veces. Se trata de Stefan Mandel, un matemático que investigó durante mucho tiempo hasta llegar a crear un "método que aumenta exponencialmente las probabilidades de tener el décimo ganador", según explica Business Insider.

Con su fórmula llamada "condensación combinatoria", en donde aseguró que era capaz de acertar 5 de los 6 números de la lotería rumana, reduciendo el número de combinaciones posibles de millones a miles, ganó por primera vez.

Esto ocurrió en los años 50 y no conforme con la cantidad de dinero ganado, se instaló en Australia, donde también quiso probar su método. Sin embargo, la lotería era distinta en dicho país, por lo tanto, compró la mayor cantidad de cartones posibles con combinaciones diferentes. Así, con su insistencia, pudo ganar 12 veces más. Vamos sumando...

Con la plata que obtuvo esas doce oportunidades, de acuerdo a Business Insider, el matemático creó un "fondo de inversión legal para continuar trabajando en su método para ganar premios y repartir los beneficios entre los asociados". 

Su afán por ganar la lotería continuó en Estados Unidos

Aterrizando en el país nortemaricano, puso el ojo en una lotería estatal de Virginia con 7,1 millones de combinaciones, donde utilizó el mismo método anterior. Los cartones costaban un dólar, entonces, consiguió reunior a 2.500 inversores, es decir, 2.500 posibilidades de ganar. De esta manera, logró llegar a premios altos de hasta 30 millones de dólares.

Este hecho hizo que las reglas de las loterías en Estados Unidos cambiaran para siempre, limitando la compra de boletos por persona y no permitiendo rellenarlos fuera del establecimiento de apuestas. 

Pero también causó que la FBI y la CIA pusiera los ojos encima de él, aunque después de años de investigación, se dieron cuenta que, técnicamente, Stefan Mandel no había violado ninguna regla. De todas formas, se refugió en Israel, donde fue interrogado por la Autoridad de Valores.

Luego, en 2002, llegó a Londres, pero después de 2 años donde "condenado a 10 meses de prisión y tuvo que pagar una multa de 30.000 dólares por cultar a sus inversores la probabilidad de ganar", como consigna Business Insider.

En la actualidad, se desconoce su paradero. Pero, de acuerdo a distintas medios, se cree que el matemático vive en Vanuatu, un archipiélago del Pacífico sur, a 1.750 kilómetros de Australia, disfrutando la buena vida a los 88 años. 

 

 

Publicidad