La Luna siempre ha sido un misterio para la humanidad, incluso ahora están todos los esfuerzos puestos en ella, porque nuevamente la NASA quiere enviar al hombre a ese satélite natural. Pero aparte de eso, el lado oscuro de la Luna es el sector que más intriga a las personas por ser el menos explorado, porque, básicamente, no es visible para nosotros.
De hecho, solo cinco países han podido aterrizar en la Luna a través de su tecnología y solo uno ha podido ver esta otra cara del satélite: China. Ahora Chile junto con Israel se podrían convertir en los próximos países que han tenido la posibilidad de explorar el lado oscuro del astro, que se asocia a una zona más fría y oscura.
Esta aventura se podría hacer realidad gracias al proyecto Beresheet 2 de la ONG israelí SpaceIL, que cuenta con el apoyo de la NASA, DLR y de los Emiratos Árabes Unidos. Esta iniciativa pretende lanzar una nave espacial para que orbite la Luna y puedan alunizar dos módulos, uno en la cara brillante y el otro en el lado oscuro.
Pensaron en Chile para formar una alianza con esta parte del planeta por, según ellos, el alto desarrollo institucional y académico actual. "Si combinamos nuestras capacidades con los talentosos ingenieros chilenos este será un empuje tremendo para Chile para expandir sus capacidades tecnológicas en general y en materia espacial en específico. Podemos posicionar a Chile en la élite de un grupo muy limitado (…)”, comentó a La Tercera Shimon Sarid, CEO de SpaceIL.
Pero para que nuestro país sea parte de este proyecto, debe cooperar con el 12,5% del total del presupuesto, que equivale a unos 15 millones de dólares. Shimon Sarid visistó Chile durante los últimos días de marzo en donde se reunió con diversos actores.
Ahora la oportunidad de ser parte de una exploración al lado oscuro de la Luna es solo decisión del país, pues tiene hasta finales de mayo para dar una respuesta si es que se une o no al proyecto.
