Trondheim es un urbe al centro de Noruega en la que las bicicletas son un medio de transporte sumamente relevante y muy popular.
Según el sitio turístico Visit Norway, incluso esta localidad "se ha ganado en los últimos años el honor de ser la principal ciudad ciclista" de este país.
En uno de sus barrios más visitados, es donde se ha inaugurado el primer ascensor para bicicletas del mundo, para facilitarle la vida a las personas que pedalean y que no quieren tener un gran desafío deportivo durante un paseo tranquilo. Lo mejor de todo es que es totalmente gratuito para los usuarios.
De acuerdo con el portal citado, "entre 20.000 y 30.000 personas utilizan cada año este pequeño empujón (literalmente) para subir una pronunciada cuesta". Asimismo, informaron que tiene capacidad para cinco personas en cada viaje.
Según el medio argentino Infobae, "antes de su creación, no existía un dispositivo similar en ninguna parte del planeta". Y fue esto precisamente lo que recalcó una tiktoker que compartió su experiencia visitando esta innovación nórdica, que no tardó en viralizarse en las redes.
