El expresidente Eduardo Frei Ruiz-Tagle descartó que haya defendido a Augusto Pinochet a raíz de su detención en Londres, Inglaterra, en 1998. "Yo defendí a la soberanía de Chile", afirmó.

En diálogo con Conversaciones con la Historia de Mesa Central de Canal 13, abordó el arresto del dictador el 16 de octubre de 1998, afirmando que se encontraba en Portugal cuando se registró el hecho.

"Yo pensé que se abría una situación compleja que podía durar mucho tiempo, pero inmediatamente me contacté con Santiago. Carlos Figueroa, vicepresidente, ya se había reunido todo el comité político (...) y ahí empezamos a intercambiar opiniones, ya me tenían algunos documentos y esa misma noche yo tomo una decisión que no la cambiamos nunca durante los casi 15 meses que estuvo fuera de Chile", comentó.

Durante ese proceso, el exmandatario asumió la postura de traer de vuelta a Chile a Augusto Pinochet para evitar que fuera juzgado en España.

"Yo no defendí a Pinochet, yo defendí a la soberanía de Chile", dijo respecto a las críticas de esa decisión.

"No había ninguna institución en el mundo, ningún país podía renunciar a su justicia y sus tribunales. En ese momento recién se estaba formando, a petición de Naciones Unidas, el Corte Penal Internacional y nosotros firmamos esa Corte, a fines del '98", comentó Eduardo Frei.

Sobre cómo se abordó la postura al interior de su gabinete ministerial, el exmandatario indicó que "tomamos una decisión de Estado y tuvimos, cuando yo volví a Chile, una reunión con todos los ministros y todos se sinceraron. Todos al final apoyaron la decisión de Gobierno porque era una política de Estado, que respetaba Chile, y la opinión fue: Vuelve a Chile, va a los tribunales y tiene que enfrentar a los tribunales".

"Eso es lo que correspondió. Él llega en marzo, un día antes de que me fuera, a los dos o tres meses, por la provocadora acción que hicieron cuando llegó, que no la debieron haber hecho, la Corte Suprema, por amplia mayoría, lo desaforó y después en enero del 2001 lo condenan por el Caso Caravana de la Muerte y por otros casos. Así fue el año 2001. Fue condenado por la Corte Suprema", comentó.

"Si después en el curso del 2001 vinieron todos los alegatos por el tema de la enfermedad, la decisión de la Corte Suprema fue otra, al declararlo con demencia senil, a mi juicio, en ese fallo, debía haber señalado el listado de todos los proceso que tenía la Corte Suprema de violaciones a los Derechos Humanos. No lo hicieron, estaban en su derecho, pero yo cumplí con mi deber de traerlo y que fuera procesado en Chile", cerró al respecto.

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