El sábado el líder y fundador del Partido Progresista (PRO), Marco Enríquez-Ominami, hizo este sábado su primera aparición en un acto masivo, tras los cuestionamientos que han golpeado al ex candidato presidencial y que lo relacionan a financiamiento irregular en la política.
En su discurso, ME-O criticó a los ex Presidentes Ricardo Lagos y Sebastián Piñera, y enfatizó en "hacer un llamado a todos los partidos tradicionales: no nos mientan, no jueguen a la cachetada del payaso". Lo que le valió criticas desde la UDI.
“ME-O tiene que ir a hacer sus declaraciones a tribunales, al Ministerio Público. Una vez que haya aclarado las confusas y contradictorias declaraciones, vamos a oír sus comentarios políticos”, dijo el senador y presidente del gremialismo, Hernán Larraín.
Declaración a la que el líder del PRO volvió a responder este domingo mediante un comunicado, donde expresó que "ya he dicho que no somos perfectos, que hemos cometido errores y hemos tenido desprolijidades. Pero no cargo con el legado del CAE, no soy el padre del Transantiago, AFP, Sename, pitutos, pensiones millonarias, peor censo de la historia, colusión y el lucro con derechos sociales, ni lideré un gobierno que cuidó sus intereses ni otro que se preocupó de aumentar la riqueza de unos pocos”.
Además, el líder Progresista indicó que “quieren sacarme por secretaria para poder seguir lucrando con el Estado y abusando de la gente. Quieren pintarme de populista cuando ellos vienen prometiendo por 30 años cosas que no han cumplido”.
Para finalizar, Marco Enríquez-Ominami señaló: “Ante esto yo les propongo: vamos a medirnos a las urnas. Que la gente decida si quiere a Lagos, Piñera o a nosotros. Vamos a permitirle a la gente que escoja entre el cambio y los mismos de siempre”.
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