Es tema obligado en los partidos desde el domingo, día del triunfo presidencial y también tras la aprobación de la ley que permitirá la elección de intendentes para el 2020: a quién designará el Presidente electo, Sebastián Piñera, en la intendencia de Santiago.
La decisión no es menor. Los partidos tienen claro que el puesto se convertirá en una plataforma electoral clave, ya que la Región Metropolitana concentra el 39,4% del electorado a nivel nacional. Y la idea de los partidos es que, quien sea elegido, renuncie a su cargo en dos años más, para convertirse en candidato al mismo cargo. No sólo será el primer intendente metropolitano de la historia, sino que además, podría tener un camino seguro a conseguir un cupo senatorial por la región, apoyar las candidaturas municipales, parlamentarias y presidenciales.
En RN quieren con fuerza el puesto, porque sería una forma de consolidar su hegemonía en la región. Esto, debido a que cuentan con fuerte representación tanto en el Senado como en la Cámara de Diputados, además de tener entre sus filas al alcalde Santiago, Felipe Alessandri. Entre los nombres que han impulsado están Cristián y Nicolás Monckeberg.
En la UDI, en tanto, sienten que por política de “cuoteo”, ese cupo pertenece a ellos por la excesiva representación RN en la zona. Y ha han sociabilizado nombres como los diputados que perdieron en las últimas elecciones, Felipe Ward o Gustavo Hasbún.
