Un tuit encendió la polémica. Esta tarde durante la votación del proyecto de fortalecimiento y transparencia de la democracia en la Cámara de Diputados se rechazó una indicación de los diputados Sergio Aguiló, Hugo Gutiérrez, René Saffirio y Leonardo Soto que buscaba dar a conocer los aportes reservados entregados a campañas electorales desde 2003 a la fecha.
La propuesta que buscaba que luego de 90 días cualquier persona pudiera solicitar "la identidad de los aportantes, los montos y la identidad de las candidaturas receptoras de tales aportes" se rechazó al tener 39 votos a favor, 5 en contra y 53 abstenciones.
Fue ahí cuando Gutiérrez decidió publicar la lista de quienes -a su juicio- apoyaron que ganara "el secreto".
El diputado del PC dijo a T13.cl que sus colegas "dieron argumentos falaces" y que "la Cámara de diputados se perdió una gran oportunidad para haber terminado con un espacio de opacidad que la ciudadanía exige conocer y que fue lo que motivó que este proyecto terminase con los aportes reservados, que era una mala política que amparaba aportes perversos a la política".
En respuesta a Gutiérrez el diputado DC Patricio Vallespín señala que se trata de un "mero populismo".
“Cuando las reglas del juego están claras hay que respetarlas. En la práctica si se hizo con carácter reservado y la ley lo permitía me parece absurdo que se obligue a revelar de quienes son los aportes, más allá de quiénes sean”, explica.
El parlamentario aclara que es contrario a los aportes reservados “porque las empresas no votan, pero si existían los aportes reservados me parece populista hacer algo que es cambiar reglas de juego que se hicieron en un determinado contexto”.
Para el PPD Jorge Tarud se trata de un "populismo inconstitucional. La ley anterior le dio evidentemente garantías tanto para que los candidatos no sepan quienes contribuyen como también los que contribuyeron podían hacerlo en forma reservada".
"En consecuencia el cambio de las normas sería completamente inconstitucional y me parece de una enorme irresponsabilidad", enfatiza.
El UDI Felipe Ward es uno de los 53 que se abstuvo, ya que considera que es una medida "para la galería, es para quedar bien en lo que el sentido común indica que hay que hacer".
Ward hace hincapié en que "dar a conocer el origen de esos aportes atenta contra el espíritu de la norma. Los candidatos no sabemos quiénes son los aportantes reservados y quienes hicieron esos aportes lo hicieron justamente porque eran reservados".
La ley sobre transparencia, control y límite de gasto electoral se creó como parte de la agenda de reformas tras el caso MOP-Gate y consagra tres tipos de aporte: públicos, anónimos y reservados. En estos últimos ni el candidato ni la ciudadanía puede saber quién donó esos recursos. Según datos del Servel, un 48% de las donaciones a la última campaña parlamentaria fueron a través de esa vía.
El proyecto del gobierno sobre fortalecimiento y transparencia de la democracia y que se aprobó en la Cámara apunta precisamente a eliminar este tipo de aportes, consagrando un financiamiento estatal a la actividad política.