En sus primeros discursos ante el Congreso el 21 de mayo de 2010 y 2014 respectivamente, Sebastián Piñera y Michelle Bachelet realizaron una serie de promesas en diversas áreas de la administración central de cara al inicio de sus períodos como mandatarios: el primero en el caso de Piñera y el segundo en el caso de Bachelet.
A raíz del discurso presidencial, en T13 recogimos datos levantados por Fundación Ciudadano Inteligente en su Análisis Comparativo de Promesas 21 de Mayo: Michelle Bachelet (2014) y Sebastián Piñera (2010) para desmenuzar los compromisos suscritos por ambos presidentes y, a su vez, comparar el nivel de cumplimiento que ambos alcanzaron a un año de haber emitido sus primeras cuentas públicas.
El número de promesas es muy diferente. Mientras Bachelet hace un año realizó 58 promesas repartidas en 23 áreas temáticas (con 32 proyectos de ley asociados durante el primer año), Piñera en su primer año se comprometió a llevar a cabo 104 medidas dentro de 27 ámbitos de la administración (con 74 proyectos).
Las áreas que más compromisos contemplaron en el discurso de Piñera fueron Seguridad Ciudadana (muy en línea con las promesas de campaña del presidente de la Alianza) con diez promesas y el área del Trabajo con ocho. También tuvieron una parte importante del discurso las áreas de Democracia (ocho promesas) y las de Modernización del Estado, Regionalización y Salud (todas con seis).
En el caso de Bachelet, a raíz de la reforma educacional, el área en el que se suscribieron más promesas fue la Educación con ocho compromisos (el 13,8% del total suscrito en el discurso). Economía y Comerció, en segundo lugar, concentró siete promesas y las medidas hacia la Modernización del Estado cinco compromisos.
El detalle se puede observar a continuación:
El discurso de Piñera: Una agenda dominada por la coyuntura
A diferencia de Bachelet -quien construyó su primer discurso en función de una agenda de gobierno reformadora y dominada por proyectos de cambios estructurales- Piñera debió comprometer una serie de leyes y medidas para continuar el proceso de reconstrucción iniciado meses antes a partir de lo sucedido en el terremoto del 27 de febrero de 2010.
Por lo mismo, su discurso estuvo abocado en gran medida a esta catástrofe y, 365 días después, el Gobierno ya había cumplido un 87,5% de las promesas asociadas a este proceso. Otras áreas que estuvieron alcanzaron altos niveles de cumplimiento fueron Transporte y Telecomunicaciones (81,2%), Educación (76,6%) y Protección Social (74,8%).
Por otro lado, Bachelet orientó su discurso hacia las reformas que marcarían este primer año de Gobierno. Educación y Economía fueron las áreas con mayor número de promesas, ya que son los ámbitos en los que se enmarcaron las reformas educacional y tributaria durante el 2014. Sin embargo, los que lograron más cumplimiento fueron Justicia y Seguridad Ciudadana, ambas con un 100%. Protección Social y Equidad de Género les siguieron con 72,7% y 61,2% de cumplimiento, respectivamente.