Este lunes la Comisión de DD.HH del Senado realiza una sesión para abordar las circunstancias de la muerte del comunero mapuche Camilo Catrillanca el pasado 14 de noviembre durante un operativo de Carabineros en la comuna de Ercilla.
La principal autoridad que estará presente en la instancia será el general director de Carabineros, Hermes Soto, quien confirmó su presencia luego de la semana pasada responder preguntas por el caso ante la Comisión de Seguridad Ciudadana de la Cámara de Diputados.
Otro que declinó asistir a la sesión es el padre de Camilo Catrillanca, Marcelo Catrillanca, quien a Radio ADN aseguró "no estaban las condiciones para hablar".
Tarjeta de memoria fue desaparecida en un baño
En la ocasión el general Soto repitió la versión oficial que acabó en el procedimiento y que se dio lugar de una denuncia de un robo de vehículos a cuatro profesores de la escuela, asegurando que luego de que Catrillanca saliera herido se le relató "que se hizo todo lo posible" para evitar la muerte de Catrillanca.
Sin embargo, en la ocasión se entregó un nuevo dato respecto a la tarjeta de memoria de la cámara que habría grabado el procedimiento y que fue destruida por el suboficial del Carabineros que participó del operativo y que portaba la cámara. Según Soto, en su declaración administrativa, el uniformado que fue dado de baja especificó que "él mantuvo su tarjeta en su poder y la rompió posteriormente y la hizo desaparecer a través del baño de su casa o de algún lugar".
Quien también declaró en la ocasión fue la directora del Instituto Nacional de Derechos Humanos, Consuelo Contreras, quien aseguró que dieron cuenta que durante el procedimiento fueron detenidos cuatro adolescentes y un adulto, de los que tres de los menores y el mayor de edad fueron aprehendidos en el Cesfam de Ercilla, donde murió Catrillanca.
Asimismo, Contreras explicó que el otro menor detenido en la comunidad Temucuicui y se trata del adolescente de 15 años que acompañaba al fallecido comunero a bordo del tractor en el que recibió el impacto de bala que le quitó la vida.
"Un primer relato (del menor) asegura que iba en el tractor, estaba aprendiendo a manejar y se encontraron con Carabineros y se dieron vuelta porque habían disparos", explicó Contreras. La directora del INDH también aseguró que en su declaración el joven sostuvo que primeros eran balines de goma y después eran balas las que se estaban percutando, así que Catrillanca le pidió agacharse. No obstante, el menor se dio cuenta que el comunero había sido baleado ya que vio que salía un líquido de su nariz, por lo que se bajó con los brazos en alto, siendo golpeado con pies y puños, para luego ser subido a un auto. Tras esto, el joven dijo ver a uno de los carabineros sacar la cinta de la cámara: "Es un niño que está muy asustado por lo que vivió", añadió.
Posteriormente, el jefe de la Unidad Jurídica del INDH, Rodrigo Bustos, detalló las querellas presentadas por el caso como fueron la de obstrucción a la investigación por la tarjeta de memoria destruida y la correspondiente a torturas por los golpes que habría recibido el menor: "En todas esta acciones judiciales está muy presente esta necesidad de cautelar y proteger a este adolescente que vivió estos hechos y se encuentra muy asustado porque se trata de una comunidad que ya muchas veces ha vivido experiencias muy violentas", aseveró el abogado en la ocasión.
"La institución no se manda sola"
Una vez que recibió las preguntas por parte de los parlamentarios, Soto sostuvo respecto al actuar del algunos uniformados que "si tenemos que corregir, corregimos, si tenemos que sancionar, sancionamos y si tenemos que ponerlos a disposición de los tribunales, lo vamos a hacer".
En ese sentido, recalcó que "la institución no se manda sola" y que siempre responden a las directrices que les da el Gobierno y que no contaban con ninguna autonomía especial: "Siempre hemos cumplido lo que se nos ha pedido", precisó.
Soto añadió que lamentaba mucho lo ocurrido y señaló que sobre las cámaras que cuentan para grabar, está de acuerdo con que se necesita dar un paso más: "Le hemos planteado al Gobierno la necesidad de renovar estos elementos, de comprar cámaras con central de monitoreo, que no sean manipulables, que puedan operar en cualquier territorio del país. Ese proyecto ya lo estamos presentando en el Gobierno", aseguró.
De todas maneras, la máxima autoridad de la institución precisó que esa solicitud sería para eventos de complejidad no solo en La Araucanía, sino que en todo el país.
No se retiraría personal de La Araucanía
A la salida de la comisión, el general Hermes Soto aseguró que "siempre he tenido cercanía con las comunidades", recalcando que tuvo una buena relación con los mapuches durante su tiempo como Comisario de Angol en La Aruacanía y como Prefecto de Concepción en el Biobío.
Consultado si tras lo ocurrido se retirará personal uniformado de la Región de La Araucanía, Soto fue claro: "Si no vemos y no tenemos como cubrir las facciones y procedimientos en la zona, no podemos sacar a este personal de ahí porque no tenemos carabineros para cubrir esas facciones".
