"Cuando los recursos son escasos, priorizar y adoptar medidas concretas es muy importante" enfatizó el ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, al anunciar un protocolo de medidas de austeridad, de cara al debate en torno a los reajustes de los sueldos de funcionarios públicos.

Valdés detalló que el protocolo suscrito con los presidentes del Senado (Patricio Walker) y de la Cámara (Marco Antonio Núñez), consta de dos puntos:

El primero de ellos dice relación con que "el reajuste de remuneraciones de los trabajadores del sector público que se define a contar del 1 de diciembre de este año, como es habitual, no va regir para los más altos cargos del Estado".

Esto es un signo concreto de que el tema de la austeridad importa
Rodrigo Valdés, ministro de Hacienda

"Esto incluye a la Presidenta de la República, a los ministros de Estado, subsecretarios, intendentes regionales, ni se aplicará tampoco a las dietas de los senadores y diputados. Por lo tanto, todas estas autoridades van a mantener constantes sus remuneraciones en términos nominales al menos hasta el mes de noviembre de 2016", detalló.

En el caso de los ministros y parlamentarios, el sueldo bruto corresponde a $9.121.806.

El segundo eje del acuerdo apunta a buscar "una solución permanente" a este tema, para lo cual se conformará una comisión para revisar el sistema actual de reajuste de dietas, el que tendrá un plazo de trabajo de cuatro meses. 

La medida se toma en un contexto de menor crecimiento de la economía local y los desastres naturales que han afectado al país. La última de ellas la semana pasada con el terremoto de 8,4° Richter en la región de Coquimbo.

El presidente del Senado, Patricio Walker agradeció el respaldo del gobierno a la propuesta destacando que "que esta es la primera oportunidad en que efectivamente se produce un acuerdo entre el Congreso y el Ejecutivo para evitar el reajuste de las altas remuneraciones del Estado incluyendo a los parlamentarios". 

Por otro lado, Walker recordó que los parlamentarios no cuentan con atribuciones para disminuir sus propias remuneraciones, que de acuerdo a la Constitución son equivalentes a las de un ministro de Estado. 

El congelamiento de las dietas de altos funcionarios ha sido tema de debate en el Congreso, donde se han aprobado proyectos de acuerdo instando al gobierno a buscar fórmulas. 

De hecho, el tema marcó la primera cuenta pública del Congreso, donde tanto Núñez como Walker hicieron un llamado a congelar los sueldos de los parlamentarios y, en lo posible, de todos los altos cargos del Ejecutivo.

Este punto fue recordado por Marco Antonio Núñez, titular de la Cámara Baja: "Nosotros desde el primer minuto asumimos esta tarea de lograr el congelamiento de las dietas no sólo de los diputados y senadores, sino de los más altos ingresos de la administración de este año. Lo anunciamos con claridad en nuestra cuenta pública". 

 

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