Paula Valenzuela
El debate se ha ido instalando de a poco en los últimos días: ¿la pandemia puede aumentar la adhesión del Apruebo o del Rechazo?
Eso se han preguntado varios dirigentes y parlamentarios en Chile Vamos. El primero en lanzar una tesis al respecto fue el senador de la UDI Juan Antonio Coloma: “Eso de que había que hacer Chile de nuevo cayó por su propio peso con la pandemia”, dijo el domingo 19 de abril a T13.CL, agregando que el país ha funcionado bien en estas circunstancias sin cambiar “ni una coma” de la Constitución.
Una semana después, sin embargo, el Gobierno pondría en duda la realización del plebiscito en octubre próximo por razones sanitarias. El propio Presidente Piñera, de hecho, deslizó eventuales argumentos económicos para no concretar dichos comicios.
Finalmente, hoy miércoles la presidenta de la UDI, Jacqueline van Rysselberghe, dijo a T13.CL que antes de la pandemia “el rechazo iba como avión” y añadió que “en la pandemia la gente verá que el problema no es la Constitución”, agudizando el debate al interior del bloque.
“Las encuestas que yo he visto no me muestran un rechazo subiendo”, revela el líder de RN, Mario Desbordes. Ante una posibilidad de que este escenario pueda favorecer la opción Rechazo, el diputado sostiene que no sabe "cuál será la reacción de la ciudadanía ante la pandemia, probablemente sea al revés, lo veremos el día del plebiscito". "Habrá que esperar al plebiscito mismo, faltan todavía tres o cuatro meses, no conozco las encuestas que maneja la senadora y, por lo tanto, me parece legítimo su punto de vista, pero el punto principal acá es que el plebiscito se tiene que hacer”, señala el diputado.
Durante esta jornada se publicó un sondeo de DataCamp, que realiza estudios a empreas privadas y presta servicios a RN, que señala que el 44% de los consultados cree que el debate sobre una nueva Constitución es “más necesario” que antes de la crisis, frente al 29% que opina que es “menos necesario”. El 26%, en tanto, dice que es igual de necesario.
En Chile Vamos, los sectores a favor de una nueva Constitución sostienen en privado que una crisis económica puede ayudar a que la discusión en una Convención Constitucional o Mixta se vuelva menos polarizada y haya un ambiente más proclive a los acuerdos ante las nuevas necesidades económicas de la sociedad. “A mayores necesidades materiales de la sociedad, mayor racionalidad de los actores para tomar decisiones”, afirman.
“Más argumentos”
Tras los dichos de la presidenta de la UDI, la diputada RN Ximena Ossandón comenta que ahora el Rechazo tiene un argumento más para su discurso, que es la situación económica, pero la parlamentaria advirtió a este medio que “eso no quiere decir que sea determinante en el resultado del plebiscito”. Y, además, precisa que le parece “incorrecto” ese planteamiento, pues existen demandas sociales que aún no se han respondido.
La noche del martes, de hecho, la exministra Marcela Cubillos y directora ejecutiva de Libertad y Desarrollo había afirmado a CNN que “los argumentos económicos son una razón adicional para votar por el Rechazo”.
“La nueva Constitución incluso me hace mucho más sentido ahora en el entendido de que la actual Constitución está impregnada fuertemente en un modelo económico que sirvió por mucho tiempo, pero que hoy tiene grandes cuestionamientos; estamos en una pandemia que nos ha remecido que probablemente a todos nos ha remecido la mirada”, argumenta Ossandón.
En la centroderecha afirman que por estos días ambas opciones -tanto del Apruebo como del Rechazo- han conducido los argumentos a su favor: los primeros acuñando en la necesidad de fortalecer el rol del Estado, por ejemplo, y lo segundos, de evitar esta discusión a raíz de “nuevas prioridades”.
El diputado de Evópoli, Luciano Cruz-Coke, sotiene que la opción Rechazo, antes de la pandemia, sí venía subiendo, porque, “la gente se estaba poniendo un poco escéptica respecto de la solución que se ofrecía (con la nueva Constitución)”. “Aunque no sé si lo suficiente”, subraya.
“El 15 de noviembre se supone que concurrimos a un encuentro entre moderados y se terminó transformando en un aval para los extremos. El Apruebo venía perdiendo esa sensación de que se podían hacer cambios constitucionales relevantes dando garantías a todos los sectores”, sentencia Cruz-Coke.
Por su parte, el diputado de la UDI Javier Macaya sostiene: “Me parece evidente que las prioridades de los chilenos han cambiado. Ya antes del coronavirus, el rechazo había aumentado de manera importante su apoyo. Ahora, entendiendo que se vienen tiempos duros, sobre todo en materia económica, muchos van a estar menos disponibles para meterle más incertidumbre al futuro”.
¿Elección competitiva?
La mayoría de los dirigentes afirma que este no es un buen momento para hablar del plebiscito, sin embargo, agregan que el Gobierno fue quien reabrió un tema.
Los dirigentes -sobre todo quienes están en la posición de Rechazo a una nueva Constitución-, han hecho ver a las autoridades partidarias que sería favorable una realización del plebiscito en octubre, pues, aseguran, su opción se podría fortalecer.
“En este escenario de la pandemia va a ser una elección mucho más competitiva”, comenta Iván Moreira, jefe de los senadores de la UDI, cuya bancada está complementamente en línea con la opción Rechazo.
El jefe de los senadores de RN, Rodrigo Galilea -cuya bancada, a excepción de Manuel José Ossandón, también está por el Rechazo-, prefiere no vaticinar sobre si será o no una elección competitiva en octubre, sin embargo, recalca que hoy las prioridades de la gente están en la salud y la situación económica. “Creo que puede terminar influyendo en los resultados de octubre. Tanto en participación como en eventuales porcentajes”, dijo a T13.cl.
Con todo, en el sector afirman que hoy es complejo tomar conciencia sobre si la gente ha tomado decisiones en este momento en torno a una u otra opción, sin embargo, dicen estar conscientes de que la pandemia sí puede mover la aguja electoral.