Qué observar. Uno de los primeros anuncios que realizó el Presidente Boric antes de asumir fue que el Ministerio de la Mujer y Equidad de Género pasaría a integrar el comité político. La transversalización de género, desde entonces, se ha convertido en uno de los ejes en el funcionamiento del Gobierno.

  • Para que la agenda funcione de manera transversal y se lleven a cabo los proyectos -con compromisos por cada una de las secretarías de Estado- la ministra de la Mujer, Antonia Orellana (Convergencia Social), tiene a una encargada en cada una de las 24 carteras.
  • Así, Orellana realiza seguimientos y coordina todo lo relativo a la agenda de igualdad de género.
  • En el caso del Ministerio del Trabajo ese rol lo cumple María Karen Mejías Apablaza, funcionaria de la cartera que lidera la ministra Jeannette Jara.
  • Militante comunista, Mejías es trabajadora social de la U. Andrés Bello, realizó su tesis en 2012 y se desempeña en la función antes mencionadas desde febrero de este año. Según transparencia activa de la repartición tiene un cargo de contrata grado 5.
  • Antes trabajó como subdirectora de desarrollo social de la Municipalidad de Santiago y jefa de gestión vecinal y audiencias en la misma comuna.
  • Tiene un diplomado en Mujer y Políticas Públicas Globales, Ciencias políticas y Gobierno de la U. de Chile y un magíster en políticas públicas de U. Diego Portales.

Cargo de confianza. No es primera vez que Mejías trabaja con la ministra Jara, también militante del PC. Cuando Jara fue subsecretaria de Previsión Social, en el segundo Gobierno de la ex Presidenta Bachelet, la trabajadora social formó parte de la Unidad de Participación Ciudadana de la subsecretaría.

  • En el entorno de la ministra precisan que Mejías es de confianza de la ministra y que forma parte de su comité político.

Telón de fondo. Si hay una persona que debió tomar conocimiento de las “conductas que no eran del todo positivas” del ex subsecretario Christián Larraín -como las catalogó la ministra Jara este lunes- es Karen Mejías, al ser la encargada de género ministerial.

  • Por eso mismo, la diputada Ximena Ossandón (RN) solicitó este martes en la comisión de Trabajo de la Cámara Baja que se oficiara al respectivo ministerio para que informe las acciones llevadas a cabo por la encargada de género una vez que tomó conocimiento del caso de Larraín.
  • La iniciativa fue aprobada por la unanimidad de los integrantes de la comisión y el oficio debiese llegar esta semana al Ministerio del Trabajo.

La versión del Ministerio de la Mujer. Desde la cartera que dirige Antonia Orellana explican que la idea de que existan encargadas de género no es para tomar acciones en caso de denuncias de acoso sexual.

  • En privado plantean que quienes ostentan dicho cargo deben encargarse de implementar la transversalización de la política de género del Gobierno.
  • De hecho, son explícitos en señalar que si Mejías hubiese tomado acción alguna en el caso de Larraín habría incurrido en una falta, ya que para eso están los fiscales internos de cada ministerio.
  • Desde la repartición de Trabajo, en tanto, dicen que ya están al tanto del oficio y que luego le entregarán una respuesta detallada a la comisión de la Cámara de Diputadas y Diputados.
  • La ministra Jara ha dicho que hubo acoso laboral y sexual, lo que Larraín niega de manera tajante, señalando que su relación se congeló a partir de la reforma previsional. El gobierno anunció un sumario en contra del ex subsecretario tres días después de fuera despedido.

Tohá y los “conflictos en el entorno laboral”. La ministra Tohá abordó este miércoles por primera vez la salida de Larraín. Según fuentes de Gobierno, la jefa de gabinete fue una de las dos ministras a las que Jara les comentó la semana pasada lo que ocurría. La segunda fue la vocera Camila Vallejo.

  • Tohá circunscribió el problema a un asunto laboral, sin entregar especificaciones y sin entrar en el tema del acoso, como lo hizo Jara. “Se recibieron distintos reportes de conflictos en el entorno laboral de la subsecretaría y reclamos de personas respecto de tratos recibidos. No uno sino distintos. En virtud de aquello es que se tomó la decisión, se evaluó pedir el cargo y el subsecretario presentó la renuncia en virtud de lo anterior”.
  • La secretaria de Estado, de todas formas, defendió la forma en que se manejó el caso y negó que exista una contradicción en el gobierno frente a la previsional, lo que en el oficialismo y la oposición dan por hecho tras la salida de Larraín.
  • En la UDI están siguiendo de cerca la gestión de Jara. Para algunos el caso erosiona su rol de interlocutora en la reforma de pensiones hasta que, a su juicio, no se aclare lo ocurrido con el ex subsecretario Larraín.
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