Qué observar. Este lunes el círculo de hierro de Kast se reunió, como de costumbre, en la sede del partido. Pese a que en la agenda estaba previsto abordar temas de corto y mediano plazo, se esperaba que se abordaran las secuelas de las declaraciones de Luis Silva, el consejero electo con mayor votación, quien el domingo dijo en el Diario Financiero “¿por qué cresta siendo mayoría tenemos que llegar a acuerdos con la minoría?”.
- Ese mismo día, el fundador del Partido Republicano, José Antonio Kast decía en La Tercera que “nosotros siempre hemos estado dispuestos a conversar (…) Esperamos que esto sea de verdad una propuesta que deje conforme a la mayoría de los chilenos, no a la mayoría del Partido Republicano. Por eso es nuestra responsabilidad tan grande y así lo asumimos”.
- Esa fue justamente la línea que se acordó en el cónclave republicano realizado el miércoles y jueves de la semana pasada, como uno de los expositores, Patricio Dussaillant, desclasificó en Ex-Ante. “Les propuse el contraste con la convención anterior. O sea, aquí les corresponde un rol de de seriedad, de sobriedad. De hacer el trabajo para la tarea que la gente los eligió”, señaló.
- El Director del Departamento de Comunicación Aplicada y de la carrera de Publicidad de la PUC les transmitió tener en cuenta que “cuando uno improvisa puede terminar diciendo leseras. Por lo tanto se les hizo un llamado a hablar poco y preguntar más y contar hasta diez antes de decir cualquier cosa.
El control de daños. Pero lo dichos de Silva contrariaron todo lo acordado en el cónclave y la contradicción con Kast no pasó inadvertida. Peor: la entrevista de Silva terminó opacando de alguna forma los dichos moderados del fundador del partido.
- Fue el propio Silva que acusó recibo del error y publicó un mensaje en twitter reconociendo que había sido una mala entrevista y que “nosotros estamos dispuestos a conversar siempre y haremos todos los esfuerzos para sacar este proceso adelante, y eso necesariamente incluye escuchar al otro e incorporarlo al debate, lo que haremos”. Sin embargo, desde la oposición le enrostraron que se trataba del segundo “error” ya que días antes de la elección había dicho en Emol que “el partido no quiere una nueva Constitución”.
- Una vez que las declaraciones de Silva se hicieron públicas, al interior del partido republicano enviaron mensajes a los principales dirigentes del partido para que argumentaran que “El Profe” -como le dicen- había dado 15 entrevistas o declaraciones públicas después de la elección y que en todas había resaltado la importancia de tener apertura, diálogo y que siempre ha manifestado su intención de “aprovechar este proceso porque les presenta oportunidades para introducir mejoras que nunca han desconocido”, como dijo en su discurso tras sacar mayoría en la RM con 17,9% (707.072 votos). Era importante destacar que sus declaraciones habían sido un desliz y que no obedecían a un patrón.
- La idea era transmitir que se trataba de una “frase desafortunada” que en nada cambia la disposición de los consejeros de dialogar. “No vamos a hacer lo que hizo la izquierda cuando obtuvo una mayoría y eso ha sido consistente”, recalcó el diputado republicano Cristián Araya en Cooperativa. El jefe de bancada, Benjamín Moreno, argumentó en una línea similar.
- Pero, sobre todo, se reforzó la política adoptada en el cónclave de hablar lo menos posible y marcar su comportamiento por el contraste con la conducta que se vio en la fallida Convención Constitucional.