La oposición instó al Ministro de Agricultura, Esteban Valenzuela, a renunciar, luego de sus polémicos dichos sobre los municipios rurales ante el reclamo por la falta de seguridad en las zonas tras el asesinato a un matrimonio en Graneros, en la región de O'Higgins.
En conversación con La Tercera, Valenzuela expresó: “Aquí dejémonos de llorar, los municipios tienen más plata porque con el royalty minero le metimos plata a los municipios rurales”.
Los dichos de la autoridad le significaron críticas por parte de la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA), el presidente del gremio, Antonio Walker, quien manifestó que “estamos absolutamente desprotegidos”. Un barómetro de la SNA consigna que un 78% de los agricultores han sido víctimas de un robo.
Adicionalmente, la bancada UDI acusó que el ministro demostraba una “brutal falta de empatía”.
Este martes se llevó a cabo la comisión de Agricultura de la Cámara de Diputados, donde se leyeron los reclamos de los gremialistas. En la instancia, la diputada Paula Labra, le preguntó al ministro si iba a renunciar, a lo que Valenzuela respondió con un tajante “no”.

UDI solicita renuncia de ministro Valenzuela
Durante la comisión, la UDI calificó los dichos de Esteban Valenzuela como “una muestra alarmante del desconocimiento que mantienen de la realidad que viven los habitantes de las zonas rurales, quienes en el último tiempo les ha tocado sufrir con una creciente vulnerabilidad y desprotección por parte de las autoridades”.
“El contexto en que efectuó sus dichos resulta absolutamente inaceptable, puesto que se convierten en un insulto para todos los agricultores y vecinos de esas comunidades, quienes al igual que el resto del país enfrentan desafíos comunes ante el aumento de la criminalidad. Sin embargo, lo son aún más despreciables si tenemos en cuenta la diferencia abismal de recursos que existe entre los municipios urbanos y los que pertenecen a los sectores rurales”, reclamaron.
Adicionalmente, desde la UDI solicitaron las disculpas públicas de la autoridad, ya que “tal actitud no es propia para quien ejerce ese cargo, cuyo deber es comprender y dar respuesta a las complejidades de la vida rural, en lugar de estar descalificando las legítimas demandas de seguridad y presupuestarias de los municipios que están en dicha condición”.