La Contraloría General de la República ofició a los seis ministros de Estado que estuvieron en la casa del lobbista Pablo Zalaquett, en distintos encuentros que no fueron informados en la Ley del Lobby.
El ente fiscalizador le dio un plazo de diez días hábiles a los ministros para responder el oficio en el que se les solicita explicar los alcances que tuvieron los encuentros.
Parlamentarios de la UDI y el Partido Republicano solicitaron el pronunciamiento de la Contraloría por este caso.
Se trata de los ministros del Interior, Carolina Tohá, del Trabajo y Previsión Social, Jeannette Jara, de Economía, Nicolás Grau, de Relaciones Exteriores, Alberto van Klaveren, y de Medio Ambiente, Maisa Rojas.
El actual ministro de la Segpres, Álvaro Elizalde, también reconoció haber asistido a una reunión en la casa de Zalaquett, aunque lo hizo cuando era senador de la República y no ministro de Estado.
Todos los ministros oficiados han reconocido su presencia en la casa del lobbista, pero han dicho que los encuentros no debían informarse en la Ley del Lobby porque no se trataría de reuniones para influir en ellos en relación a proyectos de ley.
La ministra del Interior dijo, este martes, que ella acudió a una reunión con cerca de 20 personas y fue ella quien expuso antes los empresarios.
“Este encuentro en el que yo participé tiene como lógica un espacio donde se me invita a contar que está haciendo el gobierno, cuáles son sus políticas en materia de seguridad, cuáles son nuestras perspectivas como alianza de gobierno, ninguna de esas temáticas cae en la hipótesis de Ley de Lobby”, detalló la ministra Tohá.
“Yo no desconozco la Ley de Lobby, tenemos esas reuniones en Interior, y esas reuniones son aquellas en que un grupo que tiene un interés en una decisión que se va a tomar quiere ir a hacer un planteamiento para lograr que se tome una decisión o que no se tome. Esto fue al revés, no fue para hacerme un planteamiento a mí. La Ley de lobby no es para esto”, añadió.