Desde la oposición han acusado al oficialismo de una “sequía legislativa” y desde el oficialismo responden con una ofensiva coordinada con el ejecutivo, acelerando las tramitaciones de proyectos y exigiendo el cumplimiento de los plazos establecidos en el reglamento de la corporación y en caso de que esto no ocurra buscarán establecer sanciones.
El oficialismo ha acusado obstrucción de parte de los parlamentarios de la ex Nueva Mayoría y del Frente Amplio, quienes denuncian la dilatación del trabajo en comisiones con muchas audiencias y poco tiempo para abordar las temáticas prioritarias.
Según informa El Mercurio, Chile Vamos a pedido a sus diputados que hagan respetar los tiempos dentro de las comisiones, las que son presididas casi por completo por parlamentarios de oposición.
El diputado y jefe de bancada de Evópoli, Luciano Cruz-Coke, acordaron en conjunto al gobierno “usar todas las herramientas que la Constitución le concede al Ejecutivo y a diputados para que los proyectos que tengan urgencias se vean lo antes posible”.
En la misma línea se refirió la sub jefe de la bancada de Renovación Nacional, Marcela Sabat, quien estimó que “son 45 urgencias y de esas muy pocas están siendo respetadas; evaluaremos, ante este incumplimiento mayoritario, pedirle a la comisión de Ética que resuelva según corresponda si debiese existir sanción”.
Los diputados de Chile Vamos presentarán el martes un informe jurídico a la comisión de Constitución, presidida por el comunista Hugo Gutiérrez, para que se pronuncie ante las eventuales sanciones.