Cerca de las 11:30 horas de Holanda este viernes, la delegación chilena encabezada por el canciller Heraldo Muñoz, y el agente Claudio Grossman, llegó hasta la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya para entregar la dúplica, documento que pone fin a la etapa escrita de la demanda marítima interpuesta por Bolivia ante el tribunal internacional en 2013, en la que solicita que se reconozca que existe una obligación de negociar una salida soberana al Océano Pacífico.
Tras la entrega del documento, Muñoz y Grossman se mostraron satisfechos por el resultado del documento. "Es un documento muy sustantivo y que deja en evidencia las debilidades del planteamiento boliviano", señaló a la salida el canciller.
Muñoz agregó que la argumentación de los altiplánicos "ha sido una línea argumental cambiante que partió con la solicitud de un acceso completamente soberano, con cesión de territorio, y luego se transformó en los alegados orales en la posiblidad de un acuerdo práctico, o una zona especial incluso. En nuestro documento, hacemos presente esas inconsistencias, pero agregamos argumentos jurídicos e históricos para terminar bien esta parte de los alegatos escritos".
Ayer, el canciller Muñoz reiteró su confianza en los argumentos expuestos en el documento asegurando nuevamente que no está en juego la entrega de territorio soberano.
"No hay un derecho de acceso soberano al mar por parte de Bolivia, este caso no es sobre el derecho de acceso, y eso lo dijo la Corte en su fallo preliminar, y tampoco puede predeterminar el resultado de una eventual negociación si existiese una obligación de negociar, por lo tanto no está en juego la cesión territorial por parte de Chile, ni Chile lo aceptaría, y tampoco está en juego el Tratado de 1904 que fijó de manera completa y para siempre de manera perpetua las fronteras entre los dos países, así que venimos con tranquilidad a La Haya y con la certeza de que se juzgará en derecho", indicó Muñoz.
Próximas etapas del proceso
Tras el término de la etapa escrita del proceso, la CIJ deberá convocar a los agentes de ambos países para comunicar la fecha de los alegatos orales, tras los cuales entregará el fallo sobre el fondo de la demanda.
Al respecto, el canciller Muñoz explicó que "si bien esto tiene que ser decidido por los propios jueces, lo que podría ocurrir es que los alegatos orales no sean antes de junio del próximo año, y luego tendrá que fijarse esa fecha alrededor de marzo y una vez realizados los alegatos orales, habría un tiempo".