Tal como acordaron el domingo por la noche durante su conversación telefónica, la Presidenta Michelle Bachelet y el Presidente electo Sebastián Piñera se reunieron este lunes para tomar desayuno en la casa del mandatario electo.
El encuentro se extendió por casi dos horas, muy lejos de los 30 minutos que duró el desayuno donde Bachelet recibió a Piñera en 2013 tras haber ganado la elección.
La mandataria explicó que se trató de "una reunión de trabajo más que protocolar" y junto con analizar la delicada situación en Villa Santa Lucía, le informó a su sucesor que en lo que queda de periodo enviará el proyecto de Reforma Constitucional.
"Le he informado que voy a enviar el proyecto de Nueva Constitución en el espíritu de respetar ese proceso de participación", dijo.
Asimismo, se comprometió a entregar toda la información necesaria para que asuma Piñera en marzo próximo.
La mandataria además dijo que ella es "una demócrata y le entregaré la banda a quien fuera electo".
"La democracia es la democracia y me parece muy bueno que muchos de los contenidos y temáticas que hemos planteado desde el programa de gobierno han sido tomados por la oposición", agregó.
Al respecto, Piñera respondió que "nosotros siempre hemos estado de acuerdo en que la Constitución debemos perfeccionarla pero siempre en un clima de colaboración".
"Nosotros presentamos un proyecto de reforma constitucional con más de 70 reformas y estamos dispuestos y preparados para tener un debate democrático y ojalá no pensando en las próximas elecciones sino en la próxima generación", dijo.
Más allá de las formalidades, la invitación de Piñera sirvió para tomarse fotografías. El hijo del mandatario, Cristóbal, compartió una imagen de su hijo posando con la mandataria.