Este jueves el ex comandante en jefe del Ejército, Juan Emilio Cheyre fue detenido en el marco de la investigación del caso Caravana de la Muerte.
Esto luego que el juez Mario Carroza decidiera someterlo a proceso en calidad de cómplice en el marco de la investigación de 15 homicidios y secuestros en el regimiento Arica de La Serena, donde Cheyre se desempeñaba como teniente, tras el Golpe de Estado de 1973.
En entrevista con el diario El Mercurio, Jorge Bofill el abogado defensor de Juan Emilio Cheyre sostuvo que "estar ese día y saber lo que estaba pasando no es cooperar con la ejecución de los delitos".
Bofill descarta que haya existido complicidad de parte de Cheyre ya que "se necesita un acto ejecutivo del asesinato o se necesita cooperar", agregando que "estar ahí lo pone como testigo, y no como cómplice".
"Nunca hemos discutido que era el ayudante del comandante del regimiento que estuvo el 16 de octubre de 1973; lo que estamos diciendo es que él nunca realizó ningún acto vinculado a los asesinatos. Estar en el lugar en que otro comete un delito no es complicidad, a menos que se coopere con ese delito", postula el abogado defensor.
Sobre la relevancia que tiene el conocimiento de Cheyre sobre los crímenes cometidos, los cuales son claves para el juez Carroza al momento de procesar, Bofill reflexiona que lo que supo el ex comandante en jefe del Ejército es que "hubo disparos, y que estos disparos provocaron la muerte de 15 personas".
El abogado agrega que, "él no sabe quién ejecutó materialmente los homicidios, pero sí sabe que esto pasó luego de que (Sergio) Arellano -el entonces general- llegó con su gente. Estoy hablando de lo que supo ese 16 de octubre (de 1973); distinto es lo que supo con los años", explica.
Al ser abordado sobre por qué Cheyre no denunció los hechos, Jorge Bofill responde que "ahí ya no hablamos de complicidad; es una pregunta distinta (...) Él era un teniente de 25 años que no mandaba; de este tema estaba a cargo Lapostol. ¿A qué autoridad, o tribunal, iba a ir él a denunciar", comenta.
El emblemático nunca más del Ejército que hizo Cheyre en 2004
Si se podía denunciar posteriormente, Bofill argumenta que, "ya no estamos entonces hablando de la responsabilidad penal, sino política, ética (...) Ha venido prestando declaración por este tema durante 20 años, por lo tanto, la pregunta habría que distinguirla en el tiempo. En el año 73 porque no había nadie a quién denunciar. Hablamos de un mes y cinco días después del golpe militar", expresa.
¿Mea culpa?
"Lo único que puedo contestar es que en las condiciones que imperaban el año 73 en Chile, esperar de un oficial joven una conducta de insurrección era simplemente exponerse a que lo fusilaran", sentencia el abogado defensor.