La Superintendencia de Medio Ambiente (SMA) impuso este viernes una sanción de 5.300 millones de pesos a la salmonera noruega Mowi (ex Marina Harvest) por la fuga de 690.000 peces en 2018, que representa la mayor multa ambiental cursada en el país.
La SMA sancionó a Mowi con dos cargos. El primero fue calificado como "gravísimo" por el "daño ambiental irreparable producto del escape masivo de salmones" del centro de cultivo Punta Redonda, en la región de Los Lagos. En este caso, la penalidad fue de 5.300 millones de pesos.
"La multa se configura como la más elevada que se ha cursado por un único cargo por la Superintendencia del Medio Ambiente", indicó en un comunicado la autoridad ambiental.
El segundo cargo fue considerado leve "por no contar con instalaciones adecuadas para disponer mortalidad de peces", y alcanzó los 2,7 millones de pesos.
Los salmones, que eran tratados con un antibiótico no apto para consumo humano, huyeron por fallas en jaulas de contención, afectadas por una tormenta que golpeó el centro de cultivo. La SMA estimó que no se mantuvieron las condiciones de seguridad apropiadas ni elementos de cultivo de óptima calidad y resistencia.
El peligro medioambiental radica en que estos salmones constituyen una especie invasora y depredadora que provocó una disminución de la cantidad de especies endémicas de la zona y alteró el hábitat marino, según la SMA. Además, agregó que puso en riesgo a la fauna silvestre y a salmones de otros centros de cultivo ante la posibilidad de transmitirles patógenos y enfermedades.
Mowi, que tiene 15 días hábiles para reclamar la multa ante el Tribunal Ambiental y que no ha hecho declaraciones sobre la sanción hasta ahora, deberá presentar una propuesta de reparación avalada por un estudio técnico ambiental.
La industria salmonera chilena, la segunda mayor del mundo, usa 1.400 veces más antibióticos por tonelada que Noruega, el principal productor mundial, de acuerdo con la organización ambientalista Oceana.