Bloomberg

Los fabricantes de automóviles alemanes, que luchaban por el futuro del diésel, sufrieron un revés cuando un tribunal de Stuttgart dictaminó a favor de prohibir la tecnología en la ciudad natal de Mercedes-Benz y Porsche.

Según el juez Wolfgang Kern, del tribunal administrativo de Stuttgart, las prohibiciones de conducir autos con motores diésel son la única solución adecuada para limpiar rápidamente el aire, según dijo al emitir su fallo en una causa presentada por un grupo ambientalista sobre el incumplimiento por parte de la ciudad de niveles de emisión de óxido de nitrógeno que provocan smog. La decisión de Kern probablemente influya en otros casos judiciales presentados en Alemania sobre el asunto.

"Desde 2010 hasta hoy, las autoridades no han cumplido con su deber de reducir los niveles de emisiones", dijo Kern. "Las restricciones de conducción son legalmente ejecutables y, en opinión del tribunal, una medida proporcionada porque la protección de la salud supera el derecho a la propiedad y la libertad de actuar de los dueños de vehículos".

Los fabricantes de automóviles, el gobierno federal y algunos estados alemanes están tratando de evitar las prohibiciones, y en su lugar retiran vehículos y les realizan cambios para mejorar las emisiones, ya que el escándalo del engaño sobre emisiones diésel que estalló hace dos años en Volkswagen AG sigue afectando al sector. El jueves, el ministro de Transporte, Alexander Dobrindt, asumió una posición dura contra Porsche, acusando al fabricante de automóviles deportivos de usar un dispositivo ilegal en el Cayenne, y obligó a la división de VW a retirar miles de vehículos deportivos.

Corte federal

"Las prohibiciones de conducir no son fundamentalmente una solución", dijo el jefe de comunicaciones de Daimler, Joerg Howe, en un comunicado, agregando que tal medida afectará la economía, el comercio y el tránsito de cercanías. "Existen otras medidas que podrían reducir las partículas de polvo fino y el óxido de nitrógeno de manera más fácil, eficiente y rápida".

Kern dijo que cualquier apelación se trasladará inmediatamente a la corte suprema administrativa federal. Un fallo de un juez federal daría a otras ciudades como Múnich y Berlín, donde los tribunales locales también están considerando las quejas del grupo de defensa Deutsche Umwelthilfe, un plan para idear sus propias medidas a fin de luchar contra las emisiones perjudiciales para la salud.

"El juez ha recomendado prohibiciones de conducir autos con motores diésel en Stuttgart --este es un mensaje para los fabricantes de automóviles, la venta de autos diésel sucios ha terminado--", dijo Juergen Resch, jefe de Deutsche Umwelthife, después de la decisión. "Los coches diésel deben ser mejorados más allá de los arreglos de software con los fabricantes de automóviles que pagan por estas medidas".

Mientras los fabricantes de automóviles alemanes sostienen que necesitan seguir usando el diésel como un paso intermedio antes de pasar completamente a los coches eléctricos, la crisis de confianza que enfrenta esta tecnología se ha disparado en las últimas dos semanas. El 18 de julio, Mercedes-Benz de Daimler AG anunció planes para retirar voluntariamente 3 millones de vehículos diésel en Europa a fin de actualizar su tecnología, mientras que la marca Audi de VW dijo tres días después que realizará modificaciones en 850.000 automóviles. El jueves, VW dijo que ampliaría un retiro a cerca de 4 millones de automóviles para actualizar el software de los motores.

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