Luego de dos semanas de paralización y sin certezas sobre el reajuste que obtendrán los trabajadores públicos, el ministro de la Secretaría General de Gobierno, Marcelo Díaz, defendió nuevamente la propuesta de La Moneda para aumentar los salarios en un 3,2%.
Consultado sobre si el gobierno se podrá acercar a las aspiraciones de los funcionarios —que recientemente se rebajaron de un 6% a un 4%—, Díaz planteó que el Ejecutivo está "haciendo esfuerzos dentro del marco de las posibilidades presupuestarias con las que cuenta".
En esa línea, agregó que el 3,2% "no es una restricción infundada, no es un capricho, tiene que ver con el manejo responsable de los recursos del presupuesto del Estado, los presupuestos del país, que son finalmente recursos de todos los chilenos y el gobierno".
El portavoz agregó que el proyecto de reajuste involucra montos cercanos a los $900 mil millones y agregó un nuevo argumento al gobierno: la mejora a las pensiones básicas.
"En paralelo tomamos una decisión que no estaba originalmente contemplada, que fue enviar una ley para incrementar en un 10% las pensiones básicas solidarias y el aporte previsional solidario que beneficia a más de un millón 400 mil personas", dijo.
Díaz explicó que "con las limitaciones presupuestarias que tenemos hoy dia en un escenario económico más complejo, hemos hecho un esfuerzo para que los recursos del Estado se destinen prioritariamente en medidas sociales, en iniciativas que beneficien directamente a la gente. Eso nos obliga a ser extremadamente responsables en cómo distribuimos esos recursos".