Por AFP
La baja productividad y la alta desigualdad social representan un obstáculo para que la economía chilena alcance su pleno potencial, advirtió este lunes la OCDE.
Al lanzar su nuevo informe sobre Chile, el organismo estimó que el PIB crecerá éste y el próximo año 2,9%, marcando una "gradual recuperación" de la mano de un mejor desempeño de las exportaciones de materias primas y una política fiscal y monetaria expansivas.
"Chile goza de una buena salud económica", afirmó el secretario general de la OCDE, Angel Gurría, al presentar el documento, que resalta especialmente la "resiliencia" de la economía chilena para enfrentar el reciente shock de las materias primas.
Pero, con una tasa de expansión proyectada alta en el contexto de otros países de América Latina, "el triple desafío que representa cómo aumentar la productividad, mejorar la competitividad global y reducir la desigualdad, sigue presente", agregó Gurría.
La producción de cada trabajador chileno está estancada en la mitad del promedio de los países de la OCDE, mientras que casi un tercio de los trabajadores tienen puestos de trabajo informal o temporal y la mitad, un bajo nivel de competencias lectoras.
La brecha de ingresos en Chile, en tanto, es un 65% más amplia que el promedio de la OCDE, "con uno de los ratios más altos entre los ingresos promedios del 10% más rico de su población y la del 10% más pobre".
"Demasiados adultos poseen competencias básicas deficientes, al tiempo que la excesiva dependencia del empleo por cuenta propia y de los contratos de corta duración, así como el ineficiente sistema de capacitación obstaculizan el crecimiento de la productividad y el bienestar", explicó el reporte.
Para subsanar estos obstáculos, la OCDE recomendó "la adopción de reforma sociales y del mercado del trabajo centradas especialmente en la mujer y en los trabajadores menos calificados".
La organización alabó también la reforma educativa emprendida por el gobierno de Michelle Bachelet, quien entregará el cargo el próximo 11 de marzo a Sebastián Piñera.
"El nuevo gobierno necesita consolidar estos esfuerzos con más reformas para estimular el crecimiento de la productividad, la diversificación de la economía, la mejora de las competencias de los adultos y lograr que más gente trabaje en empleos formales permanentes que generen valor real", dijo el reporte