Un molusco que se encuentra presente en todo el país, y que es conocido por el color blanco de su carne ha sido durante las últimas semanas el punto de conflicto entre pescadores artesanales e industriales con el gobierno, debido a la ley que regula la forma de extracción.
La jibia -o calamar rojo-, ignorado durante años, es hoy día uno de los recursos más cotizados del mar, ya que según cifras oficiales, llega a facturar más de 40 mil millones de pesos en exportaciones al año.
La razón de las protestas
Durante los últimos días las protestas se han centrado en distintas zonas del sur del país, tanto en las regiones del Maule, Biobío y Los Ríos han habido cortes de caminos y enfrentamientos con Carabineros entre pescadores -artesanales e industriales- por la denominada "Ley de la Jibia", que fue tramitada por una iniciativa parlamentaria, sin el apoyo de ningún gobierno, y que establece la forma de extraer el recurso del mar, eliminando la pesca de arrastre, lo que -según el gremio de los industriales- los perjudicaría.
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Debido a la intensificación de las protestas y al aumento de la violencia en éstas, el gobierno de Sebastián Piñera, a través del ministro de Economía, José Ramón Valente anunció este miércoles un veto a la normativa que todavía no se promulga, lo que tampoco dejó contentos ni a los industriales ni a los artesanales.
El veto considera no objetar la eliminación del arrastre como método de pesca de la jibia, lo que a juicio de los industriales perjudica a cerca de tres mil puestos de trabajo. Junto con esto, incorporar además de la línea de mano o portera, que es la usada por los artesanales, el cerco para ser utilizado por ambos sectores.
"De este modo se cautelan los intereses de los trabajadores de ambos sectores y aseguraremos la captura y producción sustentable de este recurso", indicó el gobierno.
Los países a los que se exporta
La jibia mide en promedio 1,5 metros, y se comercializa principalmente en los mercados de España, Corea del Sur, Filipinas, Federación Rusa, República Popular de China, Estados Unidos, México, Argentina, Tailandia, Vietnam, Cuba y Costa Rica.
Su carne blanca se vende congelada, refrigerada, en tubos o anillos para distintas preparaciones, siendo una de las más utilizadas en América Latina el ceviche o el "surtido de mariscos" en Chile.
En tanto en los países de oriente la jibia incluso se vende en forma de snack tipo charqui, mientras que en Europa se come apanada. Al no tener un sabor determinado, y dada su textura, la jibia se puede incluir en varias preparaciones apetecidas en varios países.