Por: Felipe Anaiz 

Este viernes, el economista José Piñera, relanzó su revista "Economía y Sociedad", la misma que fue fundada durante la dictadura militar de Augusto Pincochet el año 1978.

En su editorial, titulada "Chile: Lo que está en juego", el ex ministro del Trabajo hizo un crítico balance sobre la situación actual de la economía en nuestro país, la cual tilda como una "catástrofe".

Asegura que el origen de dicha catástrofe tiene que ver con un error compartido por los dirigentes políticos de todos los sectores y pone el foco en el gobierno de su hermano Sebastián Piñera, donde a su juicio, se "rompió el foco que había caracterizado a las políticas públicas".

Después de todo, nadie muere de desigualdad, mientras que, en estos días, comprobamos que 1.300 niños han muerto, en último término, de extrema pobreza

"En el origen de esta ´catástrofe´ se encuentra un error fundamental compartido por los dirigentes políticos de derecha e izquierda. El gobierno anterior rompió el foco que había caracterizado a las políticas públicas desde 1975 al señalar, sorpresiva e inexplicablemente, que la desigualdad era el problema principal del país. Esa creencia condujo a la paralización de las reformas estructurales y al innecesario y dañino desanclaje de la tasa de impuesto a las empresas", expresa.

En el texto, el padre de las AFP, apunta a que el modelo económico de libre mercado mejoró la vida de los chilenos "especialmente, de los más vulnerables". En esta línea presenta un gráfico que da cuenta del despegue económico de Chile y al cual titula como "Derrotando la pobreza con la libertad".

En relación a la actual administración de la Presidenta Michelle Bachelet sostuvo que "la reforma tributaria también eliminó de golpe el gran incentivo a la reinversión de las utilidades introducido por ex Ministro Hernán Büchi. Todo ello, junto a la expectativa de una mala reforma laboral, frenaron abruptamente la inversión y el crecimiento”.

Dicho esto, para Piñera, el error principal estuvo en poner los esfuerzos para disminuir la desigualdad en los ingresos en vez de reducir la pobreza. "Después de todo, nadie muere de desigualdad, mientras que, en estos días, comprobamos que 1.300 niños han muerto, en último término, de extrema pobreza", plantea.

El gobierno anterior rompió el foco que había caracterizado a las políticas públicas desde 1975

"El doble error de colocar la reducción abrupta de la desigualdad de ingresos como el enemigo principal de una sociedad justa, en lugar del objetivo de derrotar la pobreza, y de utilizar como instrumento clave las alzas agresivas de impuestos, en vez del fomento del pleno empleo y la educación de calidad, produjo una tormenta perfecta. (...) El descontento creciente amenaza la economía y la estabilidad", asegura.

Finalmente, el ex ministro muestra algo de esperanza ante el desolador panorama que describe en su escrito y sostiene que "aunque el ´milagro´ económico chileno de crecer al 7% ha sido sepultado por la clase política, todavía vive el modelo económico de libre mercado".

Considera necesario un golpe de timón para rectificar el camino hacia el crecimiento y apunta a que si no es la Presidenta Bachelet quien lo haga, "tendrá que ser la primera tarea del gobierno que asumirá el 2018".

"La posibilidad de liberar a otros dos millones de chilenos de la desesperación de la pobreza y seguir construyendo una sociedad con libertad para todos, está en juego. No podemos permitir que, como en el mito de Sísifo, Chile esté condenado a la frustración cada vez que se acerca a la cima", concluyó.

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