Nuevamente el nerviosismo y la incertidumbre capturaron al mercado cambiario.
Tras la jornada de violencia del martes que afectó a varias regiones del país, el peso chileno cayó ayer a nuevos mínimos históricos mientras distintos segmentos de inversionistas intensificaron su apuesta por el dólar en busca de refugio.
Cifras de Bloomberg ubicaron al tipo de cambio en $ 818,80, su mayor nivel histórico, lo que representó una subida de $ 19,54 respecto al cierre del día anterior
Desde las mesas de dinero lo describen como un efecto dominó. En la mañana, el protagonismo estuvo en los inversionistas internacionales, según relata el operador de dólar de Tanner, Eduardo Kutscher, pero luego la posta la tomaron los inversionistas institucionales chilenos que inundaron las mesas con órdenes de compra.
Además de la cotización, la sesión estuvo marcada por altos montos transados. Cifras de la Bolsa Electrónica muestran que ayer se operaron US$ 1.983,7 millones en el mercado cambiario, casi 60% del promedio diario en lo que va del año.
Para el jefe de la mesa de dinero de Vantrust Capital, Carlos Martínez, los motivos detrás de la apreciación del dólar se deben en parte a la violenta jornada que se vivió el martes –incluyendo destrozos relevantes en Valparaíso y La Serena–, y también la señal que dio el Banco Central (BC) al informar que adelantaría la publicación del IPoM y la reunión de política monetaria de diciembre.
"El mercado lo interpretó como que podría bajar la tasa en 50 puntos base", explica el ejecutivo, lo que inmediatamente le quitó fuerza al peso chileno.
Por el lado internacional, pese al optimismo en torno a la guerra comercial, el segmento emergente ha estado débil. Así, la baja del peso chileno, indica el subgerente de moneda extranjera de Nevasa, Luis Eduardo Rodríguez, "ha estado en línea con la depreciación de monedas emergentes, que se ha intensificado bastante días previos al feriado del jueves y viernes en EEUU".
Es más, ayer el real brasileño y el peso colombiano marcaron mínimos históricos frente al dólar. Y la debilidad de la primera se torna especialmente relevante, señala un actor del mercado, dado que estaría provocando salidas de flujos desde América Latina, impactando indirectamente al peso chileno.
Las miradas en el Central
Ahora, con el tipo de cambio estacionado sobre los $ 800, las miradas están sobre el Banco Central a la espera de señales de mayor apoyo o de una intervención.
Las licitaciones de swaps en divisas anunciadas por el BC hace dos semanas tuvieron un punto álgido en las sesiones del 15 y el 19 de noviembre, con una alta demanda, desde entonces el interés ha ido disminuyendo. Esta semana, la participación ha sido casi nula: el lunes y ayer las licitaciones se declararon desiertas, mientras que la del martes logró una demanda de sólo US$ 20 millones de los US$ 400 millones ofertados.
Desde el mercado destacan que la medida del ente rector nunca apuntó a afectar el valor del dólar, sino que a asegurar liquidez.
Ahora, la expectativa está firme sobre lo que vaya a decir el Central en la publicación del IPoM y la reunión de política monetaria. Y si bien la expectativa de ciertos sectores es que rebajaría 50 puntos en la tasa, el consenso de la industria financiera espera lo contrario.
"No veo que el Central se esté anticipando para bajar la tasa", señala Kutscher, opinión que comparten firmas internacionales.
En tanto, Goldman Sachs dijo ayer a sus clientes a través de un informe que "el cambio de calendario no da señales de ninguna implicación en política monetaria" y que anticipan que el ente rector chileno "sea cauteloso y mantenga un ritmo de estímulo gradual", con un recorte de sólo 25 puntos base.
El estratega que cubre Chile para XP Investments, Álvaro Mollica, indica que "como sólo empujaron la reunión un par de días, no se ve como que el banco central esté tratando de actuar rápido para contener la situación".
Algunos actores ven necesaria una intervención a través de venta de reservas, pero existen dudas sobre en qué momento se podría materializar.
"Creo que en niveles superiores a $ 830 el Banco Central podría realizar algún tipo de intervención", indica Rodríguez de Nevasa, mientras que Martínez, de Vantrust, asegura que si es que hay una intervención, ve difícil que sea antes de la reunión de política monetaria.
Desde la primera vez que el peso chileno superó la línea de los $ 800, hace exactamente dos semanas, los inversionistas han estado preguntándose cuándo el Central intervendrá el mercado, pero fuera de indicar que está dispuesto a usar sus herramientas –en lo que se consideró una "intervención verbal"–, por ahora no ha dado señales de salir al mercado a estabilizar el tipo de cambio.