Por Juan Pablo Figueroa
Al menos 25 personas esperaban esta mañana afuera de la oficina de IM Forex, la empresa de inversiones que crearon en 2013 los hermanos Víctor e Ivonne Pantoja Torreblanca, su turno para que les explicaran qué pasará con sus dineros. Adentro, apelotonados, otra veintena de clientes exigía a gritos que les devolvieran lo invertido.
Los hacían pasar por grupos, les entregaban un formulario para que solicitaran la devolución de sus fondos y les entregaban excusas. Pero no devolvieron ni un solo peso.
Pablo Rojas, account manager de la compañía que hoy es investigada por la Fiscalía de Alta Complejidad por posible estafa y por la Superintendencia de Bancos e Instituciones Financieras (SBIF) por infringir la ley de bancos, fue el encargado de recibir a la gente. Algunos venían de muy lejos. Un hombre acababa de bajarse del avión que lo trajo desde Punta Arenas únicamente para estar en esa reunión.
Había también varios miembros de las fuerzas armadas. Muchos tenían todos los ahorros de su vida invertidos allí. Otros tantos tenían la esperanza de salvar algo de su patrimonio, luego de ya haber perdido millones en la estafa de AC Inversions. El factor común era la incertidumbre y la pregunta que todos le hacían a Rojas era la misma: ¿cuándo devolverán la plata?
El contrato que firmaron los cerca de 1.400 clientes que la empresa dice tener, establece un plazo de 10 días para reversar el dinero una vez que se solicite la devolución. Para aquellos que llevan más de un año invirtiendo, se les devolvería el 100%. Los que aún no cumplen ese plazo, serían castigados con el 10% del monto total y un mes y medio de rentabilidad. Si se considera que las utilidades mensuales que IM Forex garantiza a sus clientes van desde el 5% al 10%, ese castigo podría implicar hasta un 25% de la inversión. Por eso Rojas les decía que si optaban por sacar su dinero, tendrían que asumir la pérdida.
"Ya no me importa. Lo que quiero es recuperar al menos la mitad de mi plata", decía un hombre en el pasillo, mientras esperaba y oía a través de la mampara.
En este video, Pablo Rojas explica a las personas el procedimiento para recuperar el dinero y asegura que la orden de pago debe darla la fiscalía.
Las excusas
Pese a las reiteradas preguntas de los clientes, el empleado de IM Forex no pudo entregar ninguna fecha fija para pagar los dividendos atrasados o devolver el dinero.
“Todos los movimientos de platas que hace la compañía están siendo investigados por la fiscalía. Pero nuestras cuentas no están congeladas. Si fuera así, no habríamos podido hacer depósitos ni el jueves ni el viernes. Ayer alcanzamos a hacer la mitad de los depósitos hasta que se puso la demanda que la prensa informó, y no pudimos seguir hasta demostrar (a la fiscalía) de dónde venían y hacia dónde iban esas platas”, dijo Pablo Rojas.
A cada uno de los clientes que llegaron a la oficina se le entregó un formulario que debían llenar con sus datos para dar término al contrato. El documento no es más que una solicitud, ya que una vez procesado, se calcularán los fondos a devolver y se contactará a los clientes para ver si aún quieren que se les devuelva su inversión. Casi todas las personas que llegaron esta mañana llenaron el documento.
Uno de ellos preguntó a Rojas qué respuesta da la empresa frente a los cuestionamientos sobre si realmente invierte los fondos de sus clientes en el mercado forex. El respondió: “En este minuto, eso es lo que se está demostrando ante la fiscalía. Es por eso mismo que los dueños de la empresa no están ni siquiera detenidos. Simplemente están apoyando el proceso de investigación que se lleva a cabo”.
Sin embargo, ante la consulta de dónde está el dinero, Rojas señaló que “cuando tú me pides una devolución… hay que liquidar la inversión… por eso nos tomamos 10 días. No tenemos la plata en caja”.
Aquí está el audio con la respuesta de Rojas a un cliente:
Rojas también aseguró que Víctor Pantoja, quien ayer declaró como imputado ante los fiscales José Villalobos y Pablo Norambuena, continúa efectuando transacciones en el mercado de divisas y que todas las inversiones de los clientes están en sus manos.
