El nombre de Gabriel Ruiz-Tagle ha estado en el centro del debate luego que se conociera el caso de colusión entre CMPC y SCA (Ex Pisa) para fjar cuotas de mercado y regular los precios del papel higiénico y productos de papel tissue como servilletas y pañuelos desechables.
La vinculación de Ruiz-Tagle radica en que fue dueño de Pisa y que -según la Fiscalía Nacional Económica- tuvo un rol clave en la génesis de los contactos con CMPC. El ex ministro ha descartado haber participado de la colusión, señalado que en las citas que sostuvo con el entonces gerente general de CMPC, Jorge Morel, fueron "para reclamar contra las irregularidades como pactos de exclusividad con retail, bloqueo para las promociones, situaciones que nos tenían complicados".
Es muy peligroso estigmatizar a sectores que son fundamentales para el desarrollo. Es malo para el país; les guste a algunos o no, ellos son los que crean los empleos
El caso, además, ha tomado ribetes políticos a tal punto que son varias las voces de "Chile Vamos" que piden reevaluar su posible candidatura a la alcaldía de Providencia.
En medio de este complejo escenario para el ex ministro de Deportes, hoy Revista Caras reflotó una entrevista publicada el 30 de enero de este año y donde Ruiz-Tagle abordaba los anteriores casos de colusión.
Claramente hay un esquema ideológico en la estigmatización que se busca hacer de los empresarios.
Consultado sobre cuánto han afectado la imagen del mundo empresarial casos como Cascadas, la colusión de los pollos y la polémica de Juan Bilbao, Ruiz-Tagle sostuvo que "le han hecho mucho daño, se ha generado una imagen de corrupción que no es tal".
"Chile ha sido calificado por todos los organismos internacionales como uno de los países menos corruptos del mundo, un tremendo orgullo. Es importante que las situaciones irregulares se esclarezcan y combatan. Durante nuestro periodo comenzó a actuar la Fiscalía Económica, impulsada precisamente por el gobierno de Piñera", agregó.
Incluso, aseveró que pese a la molestia de algunos sectores la FNE "fue una iniciativa que estaba en la dirección correcta".
Luego, retomó el tema, señalando que "es muy peligroso estigmatizar a sectores que son fundamentales para el desarrollo. Es malo para el país; les guste a algunos o no, ellos son los que crean los empleos y no es bueno que el dinamismo se pierda por conflictos de origen político".
Ruiz-Tagle profundizó en su idea de los conflictos de origen político, diciendo que "cuando se habla de ‘los empresarios’ hay cuestiones que, obviamente, muchas veces responden a convicciones políticas y que indirectamente producen daño".
"Al país le interesa que ojalá exista la mayor cantidad de emprendedores posible, pero si su trabajo tiene una etiqueta que a priori se asocia con la corrupción y abuso, entonces como sociedad tenemos un problema", remarcó.
