El gigante bancario HSBC anunció el martes que sus ganancias después de impuestos durante el tercer trimestre se desplomaron un 46% interanual, debido a las consecuencias de la pandemia de coronavirus y las tensiones entre China y Estados Unidos.
La desaceleración económica mundial causada por el nuevo coronavirus ha golpeado duramente a los gigantes financieros y no hay muchos visos de mejora ahora que Europa y Estados Unidos se adentran en el invierno, con un aumento en el número de infecciones.
Pero HSBC tiene otro quebradero de cabeza: las tensiones geopolíticas debido a su condición de canal de negocios entre China y Occidente.
Además el gigante financiero, centrado en Asia, está inmerso en una reforma mundial, con el fin de suprimir unos 35.000 puestos de trabajo para 2022.
En el tercer trimestre del año las ganancias después de impuestos fueron de 2.000 millones de dólares, con una caída de los ingresos del 11% hasta 11.900 millones de dólares, anunció HSBC en un comunicado.