El presidente estadounidense Donald Trump anunció este miércoles que retrasó dos semanas el aumento de aranceles a importaciones chinas por un valor de 250.000 millones de dólares como un "gesto de buena voluntad" hacia Pekín.
El aumento del 25 al 30 por ciento estaba programado para el 1 de octubre y ahora se hará efectivo el 15 de ese mes.
El mandatario estadounidense dijo en Twitter que tomó la decisión "a pedido del viceprimer ministro de China, Liu He, y debido a que la República Popular de China celebrará su 70 aniversario el 1 de octubre".
La medida también tiene lugar después de que China anunciara más temprano este miércoles que dejará exentos del pago de impuestos suplementarios a 16 productos provenientes de Estados Unidos.
El pasado 1 de septiembre tuvo lugar el último episodio de la guerra comercial que enfrenta a Washington y Pekín con la entrada en vigor del aumento del 10 al 15 por ciento sobre importaciones chinas por un valor de 112.000 millones de dólares.
Está previsto que el próximo 15 de diciembre se aplique ese mismo aumento al resto de importaciones grabadas al 10 por ciento, hasta alcanzar los 300.000 millones de dólares.
Como represalia, China puso en marcha aranceles de entre el 5 y el 10 por ciento a productos estadounidenses valorados en 75.000 millones de dólares.