El pasado viernes 17 de junio, en horas de la tarde y luego de una sesión extraordinaria del directorio de Codelco, el Presidente Gabriel Boric anunció la decisión de cerrar la fundición Ventanas de la división homónima de la firma estatal, emplazada en la comuna de Puchuncaví, zona costera de la región de Valparaíso.
La decisión acarreó una serie de reacciones, incluido un paro nacional anunciado por los trabajadores de Codelco para este miércoles.
Sin embargo, el cierre se ampara en los recientes episodios de emergencia ambiental ocurridos en la zona de Quintero-Puchuncaví. Ante esto, acompañado por las ministras de Minería, Marcela Hernando, y de Medio Ambiente, Maisa Rojas, el Presidente Boric enfatizó que su gobierno no aceptará más “zonas de sacrificio”, entendiendo que estos son aquellos lugares poblados donde existen industrias que generan un impacto en la salud de las personas debido a su contaminación.
¿Qué hace Ventanas?
Codelco tiene ocho divisiones: Chuquicamata, Radomiro Tomic, Salvador, Andina, El Teniente, Ventanas, Gabriela Mistral y Ministro Hales. Ventanas es la única que no está asociada con un yacimiento y tiene dos partes: la fundición –la más deficitaria desde el punto de vista económico– y otra parte que es la refinería.
Según detalla Codelco en su sitio oficial, “División Ventanas es una fundición y refinería en la que se procesan concentrados de cobre, para producir principalmente ánodos y cátodos. Este producto está considerado entre los tres mejores a nivel mundial y alcanza una pureza de 99,99%, lo que otorga mayor valor agregado al principal recurso minero del país”.
“El 50% de su abastecimiento proviene de los concentrados de los pequeños y medianos mineros desde la IV hasta la VI región, y la otra mitad de la Gran Minería (divisiones Andina y Teniente, y Anglo American)”, agrega la empresa estatal, destacando que “al 31 de diciembre de 2021, su dotación propia era de 774 personas”.
Ánodos y cátodos
Para saber aún más acerca del proceso que realiza esta fundición y refinería, es importante conocer que los ánodos son el producto resultante de la fundición que es moldeado en planchas de cobre, según explica Codelco Educa.
En la última etapa del proceso productivo del cobre sulfurado, la electrorrefinación, los ánodos –también conocidos como cobre blíster– obtenidos en la fundición se transforman en cátodos de cobre de 99,99% de concentración, listos para ser comercializados en el mercado mundial.
Esto se lleva a cabo mediante el proceso químico de la electrólisis –utilizado también para obtener la primera molécula de hidrógeno verde en Chile– la cual consiste básicamente en disolver los ánodos provenientes de la fundición a través de la aplicación de corriente eléctrica.
(Imágen: Codelco Educa)
“Se coloca alternadamente un ánodo (plancha de cobre obtenido de la Fundición) y un cátodo (placa muy delgada de metal) en las denominadas celdas electrolíticas, que son como enormes piscinas con una solución de ácido sulfúrico y agua, por las que se hace pasar corriente eléctrica”, explica Codelco Educa.
“Esta acción hace que el cobre del ánodo se disuelva, produciendo cationes y electrones, los que se dirigen al cátodo y se adhieren a él. Es decir, el cobre se corroe en los ánodos para depositarse en los cátodos (placa metálica)”, agrega.
El proceso mediante el cual el cobre se despega de los ánodos y se traslada a los cátodos puede durar entre 12 y 14 días. Luego de ese periodo, el ánodo se habrá disuelto en un 85%. El 15% restante se retira, se lava y se vuelve a fundir para reingresarlo al proceso. De esta manera, los ánodos que llegaron con un 99,7% de concentración de cobre desde la etapa de fundición, se transforman en cátodos de 99,99% de pureza.
En el siguiente video puedes descubrir cómo se produce un ánodo de cobre en la División El Teniente de Codelco.
Pérdidas económicas
Desde al menos 2009 –más de una década– que la División Ventanas arroja pérdidas para Codelco. En 2021 llegaron a 66,2 millones de dólares y en 2020 a 116 millones de la moneda estadounidense (antes de impuestos).
En 2019, Ventanas fundió 107 mil toneladas métricas del material, según datos que aportó Ex-Ante. En 2020, en tanto, fueron 117 mil toneladas métricas, indicadores que mejoraron en 2021. Sin embargo, en su memoria de ese año la estatal debió anotar que en 2020 existió un deterioro del valor de los activos de la División por 24 millones de dólares antes de impuestos.
Constantes problemas medioambientales
Los últimos episodios de intoxicación en Quintero, registrados en este mes de junio, no son nuevos en la zona.
Uno de los casos más recordados es el ocurrido en 2011, cuando el 23 de marzo una nube tóxica de azufre cubrió una parte de Puchuncaví y afectó a 23 niños y siete adultos de la Escuela Básica La Greda, establecimiento ubicado a sólo 500 metros del complejo industrial Ventanas.
El escándalo a nivel nacional fue tal que, en julio de ese año, el entonces ministro de Salud, Jaime Mañalich, anunció el cierre y traslado de la escuela a dos kilómetros del lugar en que se encontraba.
La fundición y refinería División Ventanas de Codelco asumió la responsabilidad en aquella ocasión, aunque el caso no llegó a juicio y en 2013 se alcanzó un acuerdo en que la estatal se comprometía a crear un fondo para el apoyo exclusivo en prestaciones de salud, además de financiar la construcción de la nueva Escuela Básica La Greda.